El Gobierno ha prometido 19.000 millones en 'Pertes', pero solo ha licitado un 17% del dinero

El Gobierno ha anunciado esta semana dos nuevos Perte en medio de las críticas por retrasar la concesión de ayudas por el alza de los combustibles y la energía. El Consejo de Ministros del martes pasado aprobó el Perte aeroespacial y el Perte del ciclo del agua, con lo que ya son nueve los proyectos estratégicos que se validan oficialmente en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

‘Pertes’ que se han anunciado con grandes cantidades de inversión pública que ya suman los 19.000 millones de euros, nada menos que el 27% de todo el dinero que la UE ha concedido a España en el marco de los fondos europeos Next Generation. El problema es que esta lluvia de millones sigue sin llegar a las empresas, quedándose solo en grandes ruedas de prensa con muchas promesas, pero con una nula ejecución.

El Gobierno ha anunciado sucesivamente hasta seis Perte en el último mes y medio intentando acallar las críticas por su manejo económico en la crisis. Pero la realidad indica que hasta la fecha solo se ha comprometido la licitación de 3.319 millones de euros, apenas un 17,5% de todo el dinero prometido, según el cribado realizado por THE OBJECTIVE en base a los datos publicados por en la web del Plan de Recuperación.

Perte del coche eléctrico

Este diario también ha comprobado que estos recursos solo corresponden a convocatorias de tres de los nueve Perte prometidos y que el grueso del montante (el 88%) corresponde exclusivamente a los 2.950 millones del Perte del coche eléctrico. Una convocatoria que se conoció hace poco más de una semana y tras muchas críticas del sector por un retraso de más de un año entre su anuncio en el Consejo de Ministros y el comienzo de la licitación.

El Ejecutivo ha acelerado las convocatorias desde que a comienzos de año arreciaran las criticas de empresarios y grupos políticos por la adjudicación de los fondos europeos. Sin embargo, los Perte siguen siendo la asignatura pendiente. Lejos de resolver los proyectos que ya estaban aprobados, el Gobierno no ha parado de seguir anunciando nuevos macro proyectos tractores, comprometiendo más sectores y más recursos.

Como ya informó este diario, a comienzos de febrero el Ministerio de Asuntos Económicos publicó las convocatorias que pretende lanzar en los próximos seis meses por valor de 24.000 millones de euros, pero sin prácticamente ninguna licitación que involucrase a los Perte. El propio Gobierno atribuye a estos proyectos la responsabilidad de transformar España y modernizar el tejido productivo y empresarial. Son los grandes ejes del Plan de Recuperación y Resiliencia y el dinero que debería llegar de manera más directa a las empresas dado su carácter transversal y capilar.

Plazos de los Perte

En el mundo empresarial se considera que el hecho de que estas convocatorias se sigan retrasando es una nueva prueba del retraso de los Perte y de que, pese a la velocidad de crucero que quiere imponer el Gobierno al reparto de fondos europeos, su ejecución está sufriendo nuevos retrasos en el comienzo de este 2022.

El mejor ejemplo es el Perte del coche eléctrico. La licitación se abrirá este 1 de abril y se cerrará un mes después. El Gobierno indica que el plazo para la resolución será de tres meses desde la presentación de la solicitud. Si transcurrido dicho plazo el órgano competente no hubiese notificado dicha resolución, los interesados estarán legitimados para entender desestimada su solicitud.

Del mismo modo, el primer pago se realizará entre finales de octubre y principios de noviembre de 2022 y el segundo, a lo largo de 2023. Está condicionado a la presentación antes del 15 de septiembre de 2023 de la situación de las inversiones realizadas hasta la fecha, por tanto el segundo pago se realizará también a finales de 2023.

Las convocatorias

Según indican las empresas consultadas, si el Perte del coche eléctrico fue aprobado en el Consejo de Ministros del 13 de julio de 2021 y se siguen los mismos plazos con el resto de proyectos, la recepción de recursos a las empresas adjudicatarias no se espera para este 2022.

De momento, además de los 2.950 millones del Perte del coche eléctrico (de los 4.300 millones de todo el proyecto) solo han salido a licitación 300 de los 6.929 millones comprometidos en el Perte de energías renovables, hidrógeno renovable y almacenamiento. En total, cinco convocatorias. El resto del montante corresponde al Perte de salud de vanguardia con 69,5 de los 982 millones comprometidos.

Después de aprobar el Perte del coche eléctrico en julio de 2021, se aprobó el Perte de salud el 30 de noviembre y el de energías renovables el 14 de diciembre. Después de las críticas porque el dinero no estaba llegando a las empresas, el Ejecutivo aprobó el Perte agroalimentario el 8 de febrero con 1.000 millones de euros y días antes de las elecciones en Castilla y León, con gran población que vive de la agricultura. Un anuncio que la oposición calificó de electoralista y denunció ante la Junta Electoral.

Lluvia de millones

Posteriormente, se anunció el Perte de la nueva economía de la lengua con 1.100 millones. Se hizo el  1 de marzo y días después del estallido de la guerra en Ucrania. A partir de esta semana en todos los Consejo de Ministros realizados hasta la fecha se han anunciado Perte. El de la economía circular el 8 de marzo con 492 millones, el de la industria naval el 15 de marzo con 310 millones y el Perte aeroespacial y el del ciclo del agua el 22 de marzo. Estos dos últimos suman casi 4.000 millones de euros.

Todos estos anuncios coincidieron con tres semanas críticas para el Gobierno con manifestaciones y paros de los transportistas en los últimos quince días. Un periodo en el que coincidieron las mayores inversiones anunciadas.

El problema es que el dinero sigue sin llegar a las empresas y menos a las que aspiran a participar en los Perte. Ni siquiera el Gobierno sabe cuánto dinero ha llegado al tejido productivo de los 27.000 millones que se debían repartir en 2021 y, lo que es peor, las propias empresas que ya han participado en licitaciones cerradas no saben cuándo recibirán los recursos.