Sangría en las pymes: suben los costes un 33%, ventas congeladas y margen desplomado
CEOE y Cepyme retoman la negociación sobre la subida salarial con los sindicatos con un informe que recoge indicadores macroeconómicos preocupantes
Gerardo Cuerva, presidente de Cepyme. | EP
La posición actual de las pymes españolas no es la mejor. El último ‘Indicador Cepyme sobre la situación de la Pyme. Coyuntura de las pequeñas y medianas empresas españolas’ así lo refleja, destacando, entre sus claves, una tendencia descendente que viene arrastrándose por las empresas desde el segundo trimestre de 2022 y que seguía así al cierre del año.
Grosso modo, los servicios de Estudios Económicos de Cepyme señalan, entre otros elementos, cómo los márgenes se continúan estrechando por efecto de la inflación, teniendo en cuenta la subida de los costes, en particular laborales, así como una mayor carga financiera y el estancamiento de las ventas, con mayores tipos de interés para el crédito, que acaban impactando en la marcha de las empresas.
Así, en los últimos 24 meses, según datos del Banco de España, del Instituto Nacional de Estadística, CESCE o los Registradores, los costes acumularon un aumento del 33% en las pymes, mientras que, en las pequeñas empresas ya alcanzaron el 36,8% desde el cuarto trimestre de 2020.
Las ventas, dentro del bloque de Actividad, son otro de los elementos perjudicados para el entorno de las pymes. Y es que, aunque las ventas de las pymes crecieron un 11,7% interanual, continúan siendo el reflejo de la inflación, y de hecho, el crecimiento apuntado es el más bajo de los últimos cinco trimestres. Una vez que se corrigen las ventas por los cambios de los precios, se observa que los volúmenes vendidos solo aumentaron un 1% internanual en el cuarto trimestre. Se trata del menor incremento en un año y medio. Si se dejan de lado los peores trimestres de la pandemia, no se registraba un aumento moderado de los volúmenes vendidos desde junio de 2014. Es más, el indicador constata que los volúmenes vendidos pierden vigor cuando aún resultan un 1,9% menores que los de 2019.
Desplome del margen empresarial de las pymes
Ante este escenario, no es menos llamativa la caída de la actividad de las pymes, en las que también se advierte un cambio de tendencia, debilitando la creación de empleo de 2022, y derivando también en la primera pérdida neta del número de pymes desde 2013, a excepción del periodo de la COVID. En números absolutos, en 2022 se destruyeron 1.151 pymes de forma neta. Destaca la caída de las empresas agropecuarias en un 6,8% y las industriales en un 0,8%.
Con estos mimbres, la patronal Cepyme quiere que este miércoles UGT y Comisiones Obreras se sienten a negociar la subida salarial de los trabajadores para los próximos años con un ánimo menos político y más acorde con la actual realidad económica. Una realidad que, según el Indicador de la patronal de la pequeña y la mediana empresa, no está para propuestas como la formulada por los sindicatos en su anterior informe, y que consiste en crear un organismo ad hoc -como ya informó en exclusiva THE OBJECTIVE– con la ayuda de la agenda tributaria, para controlar los beneficios de las empresas, y para que, en función de dichos beneficios -que podría suscribirse a un análisis de las ventas-, se sustanciara otro porcentaje del incremento salarial de los trabajadores.
Este martes, el presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva, señaló concretamente este aspecto de la realidad económica, incidiendo en esos indicadores que preocupan a los empresarios, y que deberían ser entendidos por los sindicatos a la hora de plantear sus propuestas salariales, según explicaba a los medios. Asimismo, Cuerva también ahondó en otra cuestión: la intromisión del Gobierno en la política salarial de España, máxime -subrayó el presidente de Cepyme- cuando en el marco de la AENC (Acuerdo para el Empleo de la Negociación Colectiva), se han sellado 45 pactos.
Este miércoles, CCOO, UGT, CEOE y Cepyme se reunirán a las 18.00 horas, con el fin de explorar las posibilidades reales de alcanzar un acuerdo salarial para la negociación colectiva tras la propuesta que realizaron los sindicatos a las patronales hace unas semanas y en un contexto en el que la inflación ha vuelto a repuntar hasta una tasa del 6%.
Primer contacto tras la falta de acuerdo en la reforma de las pensiones
Inicialmente, esta reunión estaba programada para el pasado 13 de marzo, pero se aplazó hasta este miércoles, día 22, por coincidir en día y hora con la mesa de diálogo social para las pensiones, del que salió un acuerdo sólo con la parte sindical, ya que las organizaciones empresariales lo rechazaron por suponer un mayor incremento de costes laborales para las empresas.
De hecho, CEOE y Cepyme advirtieron de que la reforma de las pensiones aprobada por el Gobierno con el apoyo sindical «lastrará» la competitividad de las empresas y la creación de empleo y dificultará la negociación salarial con CCOO y UGT, complicando el escenario para que las partes alcancen un nuevo acuerdo de negociación colectiva.
El último finalizó su vigencia en 2020 y desde entonces no han sido capaces de llegar a un nuevo pacto. Las posibilidades de hacerlo se truncaron con la llegada de la pandemia y después con la subida de la inflación a cifras de dos dígitos, lo que llevó a las empresas a negarse a una cláusula de revisión salarial ligada al IPC que los sindicatos consideraban imprescindible.
