El Supremo rechaza los recursos de Vox contra los nombramientos de Campo y Díez
El alto tribunal considera que carece de legitimidad para abordar la petición que hace la formación que lidera Abascal
Juan Carlos Campo y Laura Díez. | Europa Press
El Tribunal Supremo avala los nombramientos de Juan Carlos Campo y Laura Díez como magistrados del Tribunal Constitucional. El alto tribunal ha rechazado los recursos de Vox contra la designación de ambos magistrados al considerar que carece de legitimación para abordarlos, tesis que mantenía la Abogacía del Estado. Ambas sentencias cuentan con el voto particular de uno de los cinco miembros del tribunal, que considera que debió reconocerse la legitimación del partido que preside Santiago Abascal, aunque recursos debieron desestimarse.
Las sentencias, a las que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, insisten en la «especial relevancia política» de esos cargos y entiende que legitimar la adecuación a Derecho de estos nombramiento supondría «infringir clara y directamente la independencia del Constitucional». Las resoluciones también indican que la independencia Díez y de Campo «podría verse comprometida cada vez que tuviera que enjuiciar normas que ha conocido en el desempeño de sus cargos políticos».
Los magistrados sostienen en el fallo que un real decreto que da publicidad a un acto de nombramiento de unos magistrados del Constitucional «no es un reglamento, ni un acto administrativo, ni un acto político del Gobierno, pues si bien tiene encomendada constitucionalmente la iniciativa, no es el que hace el nombramiento». Además, insiste en que no es lo mismo proponer que nombrar.
Varapalo a Vox
«No siendo, por tanto, un acto del Gobierno no puede recurrirse como si lo fuera y esta Sala carece de jurisdicción no solo para conocer del nombramiento, sino también para revisar el acto del Pleno del Tribunal Constitucional que verifica que los nombramientos se han producido en quienes reúnen los requisitos constitucional y legalmente exigidos», insisten las sentencias contra el recurso de Vox.
Ambos magistrados fueron designados nuevos miembros del Constitucional en noviembre de 2022, cuando debía renovarse el tercio que correspondía al Gobierno y al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). La decisión de Pedro Sánchez causó una gran polémica, ya que ambos candidatos tenían un pasado relacionado con el PSOE. Campo fue el ministro de Justicia que concedió los indultos a los condenados del procés, mientras que Díez desempeñó un puesto de asesora en La Moncloa.
El Supremo debió haberse pronunciado hace meses. En junio del año pasado rechazó la petición de la Abogacía del Estado de inadmitir por falta de legitimación activa el recurso que presentó Vox y acordó que resolvería en sentencia si el partido verde está o no legitimado para recurrir dichos nombramientos, como ha sucedido ahora.
La Abogacía del Estado insistía en que la formación liderada por Abascal no estaba legitimada para impugnar la designación de ambos magistrados para formar parte del Constitucional (con mayoría progresista) ya que no tenía «un interés legítimo». Vox, sin embargo, alegaba que sí tenía capacidad procesal y que negársela «supondría cercenar uno de los mecanismos de control jurisdiccional de la actividad del Poder Ejecutivo» porque establecería «lagunas de control inasumibles».
