El Gobierno y la oposición venezolana se dan cita en París para retomar las negociaciones
Macron, el presidente colombiano, Gustavo Petro, y su par argentino, Alberto Fernández, se reunieron con los representantes venezolanos de ambas partes
Los presidentes de Francia, Argentina y Colombia junto a los representantes de las delegaciones venezolanas. | Reuters
La presión internacional para la reanudación de la negociación en México entre el gobierno y la oposición venezolanos ha aumentado este viernes en el Foro de París sobre la Paz, donde se espera un diálogo entre ambas partes auspiciado por Francia.
«Empezando a trabajar con la delegación venezolana», ha señalado en Twitter el embajador francés en Caracas, Romain Nadal, junto a una imagen del representante del oficialismo Jorge Rodríguez y de la oposición Gerardo Blyde en el Foro de París para la Paz.
El presidente del Foro, Pascal Lamy, ha explicado a la AFP que «los venezolanos y otros países latinoamericanos [le] pidieron si el foro podía acoger este año un diálogo entre estas partes venezolanas que hasta ahora no se hablaban».
Macron, el presidente colombiano, Gustavo Petro, y su par argentino, Alberto Fernández, se empezaron a reunir en la tarde con los representantes venezolanos de ambas partes en un encuentro privado.
A continuación, ya sin los presidentes, Blyde y Rodríguez deben mantener una discusión en presencia de representantes de Noruega, México y Francia, indicaron a la AFP fuentes conocedores de las conversaciones.
La quinta edición de este foro de dos días tiene acento sudamericano con la presencia de los presidentes de Colombia y de Argentina, así como un discurso en vídeo del mandatario brasileño electo, Luiz Inácio Lula da Silva.
Aunque Macron impulsó el evento en 2018 para pensar la gobernanza mundial y el multilateralismo, este también busca «ofrecer un espacio de diálogo para prevenir conflictos», como es el caso de la crisis en Venezuela.
París y la organización buscan crear una dinámica para que pueda retomarse el proceso de México, que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, congeló en octubre de 2021 tras la extradición a Estados Unidos de Alex Saab, un empresario cercano.
«Las negociaciones entre el régimen y la oposición deben reanudarse cuanto antes en México, empezando por un acuerdo humanitario y luego con garantías políticas», dijo el dirigente francés, la víspera al recibir en el Elíseo a su par argentino.
Maduro, cuya reelección en 2018 no reconocen Estados Unidos, Francia y medio centenar de países, envió al líder de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, como le comentó el lunes a su par francés durante una discusión informal al margen de la COP27 en Egipto.
La oposición venezolana confirmó en un comunicado la presencia de Blyde -el otro jefe de negociación en el proceso de México- a fin de presentar su «visión» y destacar «la importancia de obtener resultados de forma urgente».
El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, también se reunió con ambos en la capital francesa, a quienes expresó que «España apoya la reanudación de las negociaciones» y está dispuesta «a acompaña el proceso», según un comunicado de su ministerio.
Cambio de rumbo en América Latina
La coyuntura internacional ha cambiado desde 2018 tras una pandemia global y una ofensiva rusa en Ucrania, que desencadenó un aumento de los precios del petróleo y de la alimentación, así como problemas de suministro de fertilizantes.
En América Latina, varios gobiernos giraron recientemente a la izquierda, como Chile, Colombia y Brasil. Y el apoyo al opositor Juan Guaidó, que se autoproclamó presidente interino en 2019, parece perder fuelle en el mundo.
Gustavo Petro, el primer presidente de izquierda de Colombia, retomó así las relaciones con el país vecino, con el que se reabrieron las fronteras, e incluso se reunió con Maduro en Caracas, en un giro de 180º de la política de su predecesor Iván Duque.
El miércoles, en declaraciones a la AFP en Egipto, Duque criticó la iniciativa en París, donde opinó que se anunciará un acuerdo «de cara a las conversaciones en México» y se abrirá «una hoja de ruta para las elecciones presidenciales de 2024».
Durante la sesión inicial del Foro, Petro estimó que una decisión mundial para descarbonizar la economía ayudaría a prevenir conflictos en Venezuela, que «sufre de una polarización política y de una inestabilidad democrática indudable [que] tiene que ver con el petróleo que está en el subsuelo».
