Despega el optimismo en el mercado cripto

Los últimos días están siendo muy movidos para el mercado de las criptomonedas y para la cotización de sus principales divisas. Bitcoin (BTC) superó holgadamente la barrera 32.000 dólares durante el pasado martes, nivel de precios con el que llevaba topándose como resistencia durante 2023, llegando en las últimas horas incluso a marcar los 35.000, en medio de crecientes expectativas de aprobación de fondos cotizados (ETFs) al contado. BlackRock, junto a otras gestoras de capital como Invesco y Fidelity, lidera la carrera hacia estos productos de inversión, marcando un hito al ser listado en el Depository Trust & Clearing Corporation (DTCC) lo que es «parte del proceso» para sacar al mercado este tipo de productos de inversión. 

Según Eric Balchunas, analista senior de Bloomberg, esto sugiere que estaríamos a las puertas de una aprobación inminente por parte de la SEC. Con todo ello, parece que el inicio oficial de la carrera institucional por ofrecer productos regulados para obtener exposición a las criptomonedas está cada vez más cerca.

El sentimiento positivo vuelve a niveles de 2021

Gracias a las últimas noticias y revalorizaciones de Bitcoin y el resto de activos, el mercado de criptomonedas está en un estado de euforia a la espera de una más que posible aprobación de ETFs de Bitcoin al contado, a la que podrían ser las de Ethereum y potencialmente otras criptomonedas. El índice de «Miedo y Codicia en Criptomonedas» alcanza 72 puntos, denotando una clara situación de «codicia».

Este índice evalúa seis indicadores clave para medir el sentimiento del mercado diariamente, y con ello es un termómetro de cómo los inversores interpretan el contexto y el apetito al riesgo. Una baja lectura indica «miedo extremo», lo que suele considerarse una señal de compra, mientras que una lectura alta puede indicar una corrección en los precios derivados de la toma de beneficios por parte de algunos inversores. 

Impacto notable de la aprobación de los ETFs

Los analistas proyectan un repunte de más del 70% tras la aprobación de ETFs, con flujos de entrada estimados en casi 40.000 millones de dólares en sus primeros tres años. Sin embargo, algunos también advierten sobre un exceso de optimismo y señalan que la SEC aún puede rechazar estos ETF. Algunas grandes firmas del sector, como el exchange Coinbase, ven probable la aprobación de ETFs al contado en los próximos meses, pero sugiere que ya está parcialmente reflejada en el precio del Bitcoin. 

De hecho, la propia empresa de intercambio de criptoactivos ha sido una de las beneficiadas de este optimismo, ya que cotiza en la bolsa de valores bajo el ticker COIN y sus títulos se llegaron a revalorizar prácticamente un 20% desde su cotización a cierre del viernes a 74,63 dólares hasta su máximo de 89,39 del martes.

Los analistas mantienen una visión positiva

En base a fenómenos similares del pasado, tanto analistas como inversores institucionales mantienen el optimismo sobre la noticia. Una referencia similar se remonta a 2004, cuando el primer ETF de oro, el SPDR Gold Trust ETF, salió a cotizar al mercado. Durante los años siguientes, los precios subieron un 18,04% en 2005, un 22,17% en 2006 y un 30,56% en 2007 debido a la elevada demanda. 

Los fondos cotizados son un producto de inversión especialmente atractivo ya que, mediante un instrumento regulado, ofrecen exposición al activo subyacente, como el oro o Bitcoin, pero cotizando en mercados también regulados mediante las firmas tradicionales que los comercializan. Esto aporta seguridad para el capital institucional, que en el caso del mercado cripto, busca en muchos casos canalizar sus inversiones más allá de los exchanges de criptomonedas.

Debido a todas las noticias, el mercado ha mejorado considerablemente su aspecto desde agosto, con una excepción en septiembre, impulsado por los avances en ETFs al contado. Como resultado de este impulso, la dominancia de bitcoin, que mide su peso con respecto a la totalidad del mercado cripto, se ha fortalecido hasta suponer casi un 54% del total del mercado, reflejando así su fuerza y estatus como refugio de valor.