Eurovisión 2022: ¿por qué España pasa directamente a la final?

La final de la 66ª Edición del Festival de Eurovisión tendrá lugar el próximo sábado 14 de mayo en Turín . En el festival, que contará con la participación de 40 artistas diferentes, España, con la cantante Chanel como representante, será uno de los cinco países que contará con un pase asegurado, sin tener que pasar antes por las competiciones de semifinales.

De esta manera, independiente del puesto conseguido en la edición anterior, países como Reino Unido, Italia, Alemania y Francia siempre tienen un lugar fijo en la final del popular festival de música. Esto es lo que se conoce entre los seguidores de Eurovisión como el fenómeno del Big Five.

Los países del Big5, una poderosa fuente de ingresos

Las razones económicas que explican la posición ventajosa de estos países en el festival de música europeo se remontan hasta 1996, cuando España, Francia, Alemania, Italia y Reino Unido decidieron crear el llamado ‘big5’  motivado por el fiasco que se llevó la organización después de que el país alemán no pasara la semifinal de aquel año. La no participación de Alemania provocó un gran agujero económico, ya que en ese momento era el país que más dinero aportaba al concurso y uno de los principales socios económicos de la Unión Europea de Radiodifusión.

En vistas de que esto pudiera volver a ocurrir, la organización ideó diferentes formatos para asegurarse que tanto España como Francia, Reino Unido, Alemania y, posteriormente, Italia  tuvieran garantizada la plaza en la gran final del concurso. 

El 50% de la audiencia de Eurovisión procede de estos países

Otra de las razones de peso para explicar el trato ventajoso hacia los países del Big Five es la audiencia. Cada año, millones de espectadores siguen la final del concurso; sin embargo, está comprobado que la audiencia de los países cuyo representante no se clasifica para la gran noche cae de forma muy notable. Es por ello que Eurovisión no puede permitirse que alguno de los cinco países con más población se quede fuera de la final, ya que, de ser así, reduciría de forma notable sus datos de audiencia.

Durante la última edición del festival España, Alemania, Reino Unido, Francia e Italia aportaron más del 50% de la audiencia, en concreto, más de 29 millones de espectadores en la gran final.  En Alemania, por ejemplo, casi se alcanzaron los ocho millones de espectadores. A pesar de que, en cifras del share, los mejores datos los protagonizan los países nórdicos – en Suecia, por ejemplo, un 85,9% de los espectadores vieron la gala de 2021 – en número de espectadores, la cifra es notablemente menor a la del Big5.

Los fans del festival cuestionan que esta ventaja sea realmente positiva para los países que lo integran, puesto que, en muchas ocasiones, pierden su exposición pública en las semifinales y los resultados no suelen ser buenos. Aún así, para todo hay excepciones. En 2010, Alemania logró el triunfo en el festival con Lena y su canción «Satellite», mientras que los italianos Mäneskin se llevaron el micrófono de cristal en la edición de 2021 con el tema «Zitti e buoni».

Un sistema «injusto» para el resto de países

El trato a favor para los países que integran el Big Five no parte de un consenso entre los países que participan en el festival, es más, en muchos casos, ha sido fruto de controversias. En 2013, Turquía se plantó y decidió no participar en el certamen, alegando que el privilegio de estos cinco países no era justo mientras que, en 2017, San Marino denunció la poca ayuda que recibían los pequeños países frente a los privilegios de los más grandes para llegar a la final. 

Sin embargo, a pesar de las quejas, no parece probable que la organización de Eurovisión vaya a eliminar esta medida favorable para España, Francia, Italia, Alemania y Reino Unido en los próximos años debido, precisamente, a que constituyen el mayor sustento económico y de audiencias de la Unión Europea de Radiodifusión.