Marco Asensio y el Real Madrid: una historia de amor con un futuro incierto

Corría el verano de 2004 en Mallorca. Gilberto y María, dos padres orgullosos, pasean de la mano de su hijo de ocho años Marco Asensio por Puerto Portals. Entonces, a lo lejos, vislumbran la figura de un imponente barco. Es el Pitina, propiedad de Florentino Pérez. El presidente merengue, vestido de blanco impoluto, se encuentra en la popa del yate. Los Asensio-Willemsen se arman de valor, se acercan al máximo mandatario blanco y le espetan lo siguiente: «Presidente, este es mi hijo Marco y sé que algún día jugará en el Real Madrid». Florentino Pérez dibujó media sonrisa en su rostro y accedió a inmortalizar tan premonitoria situación en una instantánea. 12 veranos después, en 2016, se cumpliría la descarada profecía. Marco Asensio firmaba por el Madrid. El resto es historia. 

«Está tocado por una varita mágica»

Una historia que, desde sus inicios, se ha empeñado en demostrar que Marco es un futbolista diferente. Tanto que todas y cada una de sus presentaciones se hicieron a ritmo de récord. Asensio debutó oficialmente con el Madrid en la final de la Supercopa de Europa de 2016 frente al Sevilla en Trodheim (Noruega). El que les escribe estaba presente. A los 21 minutos, el zurdo tomó la pelota desde unos 25 metros y la colocó en la mismísima escuadra. Un tremendo golazo que despertó la admiración de todo el graderío. Era el 1 a 0 de una final que el Real Madrid se llevaría en la prórroga.

Un par de semanas después tuvo lugar la puesta de largo de Marco en Liga contra la Real Sociedad: gol de vaselina con mucha clase para gritar de nuevo «aquí estoy yo». Pero esto no acaba aquí. En octubre juega por primera vez en Champions contra el Legia de Varsovia y anota otra vez y sólo unos días más tarde se mide a la Cultural Leonesa en Copa del Rey y vuelve a perforar la red. La temporada culmina con su primera final de Copa de Europa ante la Juve en Cardiff donde marca el gol que certifica el definitivo 4 a 1 y otra orejona para las vitrinas del Bernabéu. Una locura, algo nunca visto anteriormente. Asensio hizo gol en todos sus debuts con la camiseta del Real Madrid. Un registro que ningún otro novato había conseguido en los más de 100 años de historia de la entidad vikinga. Unos guarismos que justificaban la frase que repetían constantemente técnicos, compañeros y directivos desde las entrañas de Valdebebas: «Este chico está tocado por una varita mágica».

Las tres ‘salidas’ de Marco Asensio

Después de un inició fulgurante la cosa se estancó. Suplencias alternadas con titularidades y una gravísima lesión entorpecieron la explosión del balear. Desde que finalizó su exitoso primer curso, tanto entre los aficionados como en la institución convive un sentir similar: «Asensio es un futbolista con unas condiciones espectaculares, pero nunca ha terminado de tirar la puerta». Entre Marco y su entorno existe justo una sensación contraria. Algo así como que si Marco no ha conseguido ‘romperla’ ha sido por «la falta constante de oportunidades». De hecho, este año ha sido su mejor temporada goleadora desde que llegó y ni aun así ha conseguido romper la barrera que separa el banquillo del césped. 12 goles y dos asistencias a los que se agarra Marco para exigir lo que cree que merece: «Quiero continuidad, esa confianza y regularidad es importante para mí. En el Madrid la he tenido a tramos». El internacional reflexionaba de esta forma al ser preguntado por su futuro en Concha Espina desde la concentración de la selección española. El lugar no fue casual. Es importante recalcar que para Asensio y su agente (Jorge Mendes) es fundamental «tener asegurados minutos para llegar al Mundial de Qatar». Algo que el Madrid «no le puede prometer» a pesar de ser muy del gusto de Ancelotti.

Partiendo de este punto les cuento como está la cosa: el contrato de Asensio vence en 2023. Marco tiene tres salidas. De inicio el Madrid le plantea continuar en la entidad, pero sin mejora económica, «manteniendo las condiciones» que tiene hasta la fecha. Al de Calviá no le ‘llena el ojo’ esta vía y aboga por una segunda opción; mejora monetaria sustancial y larga duración del matrimonio futbolístico. El Real Madrid no termina de verlo. Las posturas se encuentran tan alejadas que aparece una tercera solución propuesta por el mismo protagonista: «Hay una tercera posibilidad. Quedarme en el Madrid cumpliendo lo que me queda de contrato».

Esta solución «no convence» al club, que vería marcharse libre a Asensio dentro de unos meses sin sacar rédito económico de la situación. Marco lo ve de manera radicalmente opuesta, ya que se marcharía sin atadura alguna y con la posibilidad de cobrar una suculenta prima de fichaje. Pero vayan descartando esta alternativa. El Madrid escucha ofertas y novias no le faltan al mallorquín. Eso sí, desde Castellana no piensan «regalar a Asensio». Y ya piensan en una cifra que ronde los 50 millones de euros. Saben que en la Premier y en la Serie A están locos por la música. Arsenal, United, Newcastle, Milán y Juventus son sólo algunos de los pretendientes. Estamos ante una historia de amor con futuro incierto que se resolverá en las próximas semanas.