Podemos sospecha que Sánchez alienta las nuevas investigaciones sobre su financiación

Las sospechas sobre la presunta financiación venezolana de Podemos vuelven a flotar en medio de un choque de media intensidad en el Gobierno de Pedro Sánchez. Algunas fuentes de Podemos creen que ambos hechos están relacionados. Apuntan a presiones de Sánchez para evitar que el choque desemboque en un adelanto electoral. La cúpula morada cree que el presidente socialista guarda información reservada y confidencial que puede utilizar en el caso de una ruptura en el Ejecutivo, y que le sirve para frenar el pulso de Podemos.

Tanto en la Audiencia Nacional como en la Fiscalía Anticorrupción se están instruyendo investigaciones que apuntan a los morados y sus contactos en Venezuela. Uno de los momentos clave de los últimos meses ha sido, sin duda, el arresto en Madrid del exjefe de los espías de Caracas, Hugo Carvajal, conocido como el Pollo. Estados Unidos exige su extradición y el juez Manuel García Castellón está aprovechando el tiempo a su disposición para reabrir la pieza sobre la presunta financiación ilegal de Podemos.

Dos tesoreros en el ojo del huracán

Carvajal apunta a maletines de dinero que llegaban a España a través de los canales diplomáticos y de empresas que actuaban como puentes. Apunta a Juan Carlos Monedero como el referente de dicha trama. Monedero no fue solamente uno de los fundadores de Podemos, sino que también ejerció en la primera etapa de tesorero del partido, tal y como ha podido comprobar THE OBJECTIVE. Un hecho insólito, ya que otro tesorero, Daniel de Frutos, también resulta investigado en un presunto caso de malversación relacionado con la consultora Neurona a la que Podemos contrató en 2019.

En el caso de Carvajal, además, los jueces italianos también se están interesando por el asunto. Tal y como informó este diario, los magistrados del país transalpino han enviado una orden oficial europea para interrogar a Carvajal en el marco de otra investigación por blanqueo de dinero y fondi neri (dinero oculto) en el que estaría implicado el partido Movimiento Cinco Estrellas. Al igual que Podemos, según Carvajal, los Cinco Estrellas de Beppe Grillo formaban para de una red internacionales de apoyo del chavismo a partidos europeos.

La cuestión no es baladí, porque García Castellón podría ampliar su investigación y buscar apoyos en Italia. El magistrado, de hecho, ejerció durante cinco años de enlace en Roma entre la justicia italiana y española.

Ahora se sabe que también la Fiscalía Anticorrupción está investigando el presunto flujo de dinero entre Caracas y Madrid. Los magistrados están interrogando a un testigo protegido (se desconoce su nombre) y al exministro de Energía de Venezuela Javier Alvarado. Tal y como publica El Confidencial, Alvarado y el otro testigo hablan de otro canal para hacer llegar dinero a España, que involucraría a la petrolera estatal venezolana PDVSA y fundaciones de la órbita de Podemos. Entre ellas, al Instituto 25M, que Monedero dirige desde la entrada de Podemos en el Gobierno y en la que también colabora Pablo Iglesias. 

Lawfare y «Estado profundo»

Nada más conocerse la acusación de Carvajal contra Monedero y Carolina Bescansa, el fundador de Podemos ha reaccionado en las redes sociales: «Esto de ser de Podemos implica con una frecuencia cansina que tenemos siempre que demostrar nuestra inocencia. Da igual que los recorridos jurídicos siempre se agoten. Como presuponen nuestra culpabilidad, importan los titulares. Y al Estado de derecho, pues que le zurzan», dijo.

Para Podemos estas acusaciones forman parte de un ataque de los jueces contra ellos, una estrategia que han renombrado «lawfare» (algo así como golpe de Estado judiciario). Aunque oficialmente los morados insisten en que no existen pruebas delictivas y hablan de un «Estado profundo» que quiere alejarles del poder, a nivel confidencial existe preocupación.

En primer lugar, por la posibilidad de que Carvajal siga detallando sus acusaciones desde Estados Unidos aunque sea extraditado. Las fuentes consultadas señalan que a través de las videoconferencias no será difícil para García Castellón seguir investigando, si así lo considera. Y en segundo lugar porque temen que haya llegado algo parecido a una «orden» de la Moncloa para investigar a y posiblemente «imputar» a algunos dirigentes de peso.

«Sánchez juega con los tiempos»

«Sánchez lo sabe todo y juega con los tiempos», mantienen a nivel confidencial las fuentes consultadas, que mencionan al CNI como la pieza que falta para que explote el escándalo. «Las declaraciones del Pollo le han dado al juez la llave para investigar libremente. Si quiere, ahora no hay nadie que le pueda parar», sospechan. Mientras que en el caso de la Fiscalía Anticorrupción, los morados creen que es un organismo sustancialmente controlado políticamente por el PSOE. 

Entre todas esas investigaciones, el partido morado empieza a temer una pinza que apunte a su pasado para alejarle del juego político. Máxime porque, además de Sánchez y el PSOE, se suma ahora el trabajo de Yolanda Díaz y la posibilidad de que su nueva plataforma sustituya en el futuro a los morados. La situación evoluciona lentamente, pero en Podemos ya se ha instalado el miedo a que los exaliados busquen la vía para alejarle definitivamente del poder, y que todo se pueda acelerar si el partido de Irene Montero fuerza directa o indirectamente un adelanto electoral.