Las empresas controladas por la SEPI perdieron 198 millones de euros en 2021

Las empresas participadas mayoritariamente por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) registraron pérdidas conjuntas de 198 millones de euros durante el año 2021. Así consta en el Informe Anual del grupo de empresas públicas dado a conocer esta semana y que entrega el detalle consolidado de las cuentas de estas sociedades. A mediados de junio, la compañía remitió una escueta nota de prensa destacando la vuelta a los beneficios de todas sus sociedades, pero solo aportando cifras de ingresos, inversiones y empleo.

La sociedad que agrupa las participaciones industriales del Estado ganó oficialmente 159 millones de euros (resultado neto después de impuestos), revirtiendo así un 2020 con pérdidas de 438,3 millones. Unas cifras que sorprendieron en el mercado, en especial porque los resultados de las empresas dependientes del Estado registraron cifras negativas durante 2021. Según publicó THE OBJECTIVE, por el impacto de la crisis energética, la inflación y los impedimentos legales para poder realizar ajustes laborales.

Sin embargo, la realidad es que las compañías de propiedad del Estado (las que son participadas en más de un 51% por la SEPI) registraron abultadas pérdidas acumuladas de 198 millones. Aunque se apreció una mejora respecto de los 500 millones de pérdidas de 2020, los números orgánicos de 2021 -y los que son tomados en cuenta para elaborar los resultados operativos de la sociedad pública- no fueron suficientes para volver a los beneficios.

Empresas emblemáticas

Entre estas compañías participadas mayoritariamente encontramos a Correos (que aportó pérdidas de 137 millones en 2021), el grupo Navantia (con pérdidas de 108,3 millones) y Tragsa (que ganó 14,4 millones). Estas tres empresas concentran el 88% de la facturación de la sociedad pública. También se incluyen otras sociedades como la Agencia EFE (perdió 12,1 millones), Mercasa (perdió 13,6 millones), Hunosa (perdió 55,6 millones), Izar (perdió 4,5 millones), Mayasa (perdió 2,5 millones), Sepides (ganó 13 millones), Alycesa (ganó 16,7 millones) o Cofivacasa (ganó 1,4 millones).

Entonces, ¿qué pasó para que se reportaran finalmente beneficios, pese a que todas las empresas participadas tuvieran mayoritariamente pérdidas? SEPI registra como ingresos y gastos las cuentas de todas las sociedades en las que tiene una participación de control (más del 51%), consideradas contablemente como resultados operativos. De esta manera, sumando la facturación y los gastos de las compañías anteriormente descritas, la sociedad pública registró en 2021 un resultado de explotación negativo de 231 millones de euros, mejor que los 473 millones negativos del año anterior, pero todavía en números rojos.

Sin embargo, la SEPI incluye sus participaciones minoritarias -en empresas como Airbus o Indra- como resultado financiero bajo la figura de puesta en equivalencia. Esto significa que incluye dentro de estos resultados solo la parte del beneficio que le corresponde proporcionalmente a su participación en ellas. En el año 2020, estas sociedades consolidadas puestas en equivalencia aportaron 61,6 millones, pero su buena marcha en 2021 les llevó a aportar a la SEPI la friolera de 357,1 millones de euros.

Sociedades participadas

Esto supuso que el resultado financiero pasase de los 55 millones de 2020 a los 388 millones de 2021, convirtiendo los 231 millones de resultados de explotación negativos en un resultado final positivo de 159 millones de euros. Es así como, y pese a que los ingresos de sus empresas participadas mayoritariamente fueron inferiores a sus gastos y que la gran mayoría registró pérdidas, las cotizadas minoritarias lograron revertir la situación y dar beneficios a la SEPI.

Entre estas empresas participadas minoritariamente encontramos a Airbus, donde la SEPI tiene una participación del 4,1% que le permitió incorporar 173,3 millones a sus resultados en 2021; Red Eléctrica con una participación del 20% y una contribución de 137 millones; e Indra con un 18,7% (al 31 de diciembre de 2021) y una aportación de 15 millones. Cierran la lista IAG con un 2,5%, pero sin contribución, Ebro Foods con un 10,3% y 18 millones de aportación y Enagás con un 5% y 22 millones de contribución.

En otro orden de cosas, el grupo de empresas agrupadas en la SEPI sumaron al cierre de 2021 una plantilla total de 75.397 empleados, lo que supone una caída del 4,7% respecto de los 79.118 trabajadores con que cerró un año antes. Esto supone que en 12 meses todas las empresas públicas agrupadas en la sociedad pública destruyeron 3.721 puestos de trabajo.

Ingresos y gastos de 2021

El Informe Anual de SEPI publicado a mediados de diciembre indica además que la cartera de pedidos bajó desde los 11.013 de 2020 hasta los 10.609 millones de 2021, que el patrimonio neto cayó desde los 2.187 a los 2.126 millones y que las exportaciones se redujeron desde los 910 a los 859 millones en un solo año.

Lo que sí creció fue la cifra de negocios, que pasó de los 4.659 a los 5.157 millones. Un dato que estuvo impulsado por la recuperación de Correos, que pasó de los 1.975 a los 2.081 millones (el 40% de los ingresos del grupo SEPI); Navantia, que mejoró su facturación de los 1.129 a los 1.333 millones; y Tragsa, que mejoró desde los 1.018 a los 1.117 millones de euros.

En el caso de los gastos de explotación también crecieron, desde los 5.440 millones de 2020 a los 5.688 millones en 2021. De ellos, la mayor partida fue el gasto de personal que pasó desde los 2.644 millones a los 2.690, seguida de aprovisionamientos que pasaron de 1.642 a 1.782 millones y otros gastos de explotación que aumentaron de los 1.018 a los 1.072 millones.