El 85% de los autónomos con asalariados ya paga a su plantilla más que el salario mínimo

Justo cuando el Gobierno ultima las negociaciones con los agentes sociales para concretar la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de 2023, una encuesta interna de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) revela que el 85% de los 450.000 autónomos con asalariados que hay en el país ya pagan a sus empleados por encima de la franja alta de subida del SMI propuesta por los expertos al Ministerio de Trabajo y Economía Social, que encabeza Yolanda Díaz.

En esta línea, y como revela un informe de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa, Cepyme, son varios los sectores en los que el salario mínimo supone un alto porcentaje de la remuneración promedio del ramo, lo cual supone una suerte de intervención de algunos ramos productivos: en el caso de la hostelería, el 91,5%; en otros servicios y actividades administrativas, más del 80%; en actividades de arte y ocio, el 73,7%; y en comercio, el 66,6%.

Negociación con varios frentes

Con todo, siguen las diferencias en cuanto a la subida que se fijará para 2023. El grupo de expertos encomendado por Yolanda Díaz aboga por una subida de entre 46 y 82 euros brutos al mes, de modo que el SMI quedaría entre los 1.046 y los 1.082 euros brutos en 14 pagas, frente a los 1.000 del pasado ejercicio.

El sindicato UGT aboga por rebasar incluso la cifra de la franja alta, y situarlo en 1.100 euros brutos, y CCOO pide los 1.082 marcados en la horquilla más elevada del comité de expertos. Se trata de unas propuestas más en consonancia con la pretensión de Díaz, auspiciada por la consecución de un salario mínimo en España que suponga el 60% del salario medio. Ello pese a que el SMI ya supera al salario medio en doce autonomías, hecho del que se hizo eco este periódico.

Por su parte la Confederación de Empresas Españolas (CEOE) apuesta por un alza del 4%, hasta 1.040 euros brutos al mes en 14 pagas, al considerar que esa subida ya está por encima del incremento salarial medio pactado en los convenios firmados en 2022 (3,03%) y de la subida aplicada a los funcionarios (3,5%).

Compromete más a las pymes

Mientras, Cepyme hace hincapié en que irse a la franja de los 1.082 sería especialmente lacerante para las empresas de menos de 50 trabajadores, las que -como ha recogido este periódico- sufren un mayor aumento de costes laborales por efecto de arrastre del SMI.

Los Gestores Administrativos, de hecho, calculan que la subida del SMI ha disparado un 40% los costes de las pymes en los últimos tres años, ya que se produce un efecto amplificador sobre el resto de sueldos de las plantillas y, como consecuencia, de la carga en cotizaciones.

Sin embargo, el presidente de UPTA, Eduardo Abad, llama la atención sobre el hecho de que un salario más alto propiciaría el consumo justo en un momento de debilitamiento de este, como revelan los últimos datos de comercio minorista del Instituto Nacional de Estadística (INE), en los que se aprecia una desaceleración del alza de ventas posterior a 2020, año de mayor impacto de la pandemia en la economía.

Además, el Banco de España viene recomendando ser cautelosos con las subidas del SMI, que ha ascendido un 38,5% desde que gobierna Pedro Sánchez, y advierte sobre su impacto en el empleo, ya que puede reducir contrataciones o jornadas.

Pacto de rentas

Con todo, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, que ha tenido discrepancias con Díaz acerca del SMI, aboga ahora por una subida del salario mínimo enmarcada en un pacto de rentas y mejoras salariales para todos los trabajadores.

Desde la oposición, su líder, el popular Alberto Núñez Feijóo defiende también una subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y asimismo de los salarios a las clases medias a través de un pacto de rentas ante los datos consolidados de inflación que se están publicando. A su entender, el Gobierno debería «salir de su inacción». No en vano, falta un mes para que se cumpla el aniversario de la invasión guerra de Ucrania y el pacto de rentas para repartir los costes de la guerra sigue sin cerrarse entre los distintos agentes negociadores, después de que España esté padeciendo alzas de precios inéditas en tres décadas.

Este martes se reúnen los agentes sociales para avanzar en las negociaciones en orden a fijar el alza definitiva del salario mínimo para 2023, con todas estas diferencias de enfoque. Debido a ellas, y a la preferencia por el consenso, su aprobación podría retrasarse al Consejo de Ministros del próximo 7 de febrero.