El Gobierno avisó a Pardo de Vera de que vetaría su fichaje por el 'lobby' de la vivienda

La Oficina de Conflicto de Intereses, dependiente del Ministerio de Hacienda, transmitió este viernes «verbalmente» a Isabel Pardo de Vera que tendría un informe negativo con respecto a su posible nombramiento como presidenta de la Asociación de Propietarios de Vivienda en Alquiler (Asval), tal y como ha podido confirmar THE OBJECTIVE a través de fuentes conocedoras del sector. «El plan A era Pardo de Vera y se daba por hecho que el informe iba a ser positivo», aseguran a este diario.

Estas mismas fuentes deslizan que la exsecretaria de Estado «estaba encantada» con su futuro nuevo desempeño. De hecho, ya se habían pactado las condiciones laborales entre ambas partes a la espera de conocer la resolución de la oficina de conflictos, según apuntan fuentes empresariales. Sin embargo, no ha podido ser. Precisamente, ante el aviso de recibir un informe de incompatibilidad con el cargo, Pardo de Vera ha decidido renunciar al nombramiento, tal y como contamos en este diario.

El aviso de la Oficina de Conflicto de Intereses se precipitó tras la información de su posible nombramiento de cara al próximo 20 de diciembre. Un anuncio que generó cierto revuelo debido a que se producía apenas diez meses después de que Pardo de Vera abandonase la secretaría de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.

Renuncia de Pardo por la polémica

Fuentes próximas a la exsecretaria confirmaban a este diario que Isabel Pardo de Vera no ocuparía este cargo. «La exsecretaria de Estado no consideraría siquiera acceder a ese cargo sin contar con el aval de la Oficina de Incompatibilidades y el beneplácito del Gobierno. Su único propósito es ser útil a los ciudadanos, y cumplir de forma estricta con la normativa de compatibilidades», aseguraban estas fuentes.

«Durante los últimos meses, Pardo de Vera ha trasladado todas las propuestas que recibe primero a la Oficina de Incompatibilidades, para tomar después una decisión al respecto», añadían. Sin embargo, esta decisión se produce tras el aviso de incompatibilidad. «Ella era el plan A y único plan en este momento», aseguran por otro lado fuentes conocedoras de la operación.

Desde la asociación daban por hecho que la propuesta de Pardo de Vera, que tendría que ser refrendada por la junta de Asval la semana que viene, se iba a producir. Contaban también con el dictamen positivo de la Oficina de Conflicto de Intereses.

Horizonte incierto en Asval

El nombramiento fallido deja a la asociación, que representa los intereses de pequeños propietarios de vivienda así como de los diferentes fondos inmobiliarios internacionales con exposición a España como Blackstone o Castlelake, sin candidato a la presidencia. Pardo de Vera iba a sustituir al actual presidente, también exalto cargo socialista como ministro de Industria durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, Joan Clos, que vencía mandato este mes como titular de Asval.

Cuando se constituyó Asval eligieron a Joan Clos como presidente «porque daban por supuesto que al ser socialista, haber sido ministro y alcalde, tendría «sintonía» con el gobierno y podría influir o mantener buenas relaciones», aseguran a este diario fuentes del sector. Sin embargo, la negociación y posterior texto de la Ley de Vivienda dejó patente la escasa influencia de Clos, según estas mismas fuentes.

Con Pardo de Vera, la asociación pretendía tener una mayor cercanía a Moncloa en un momento crucial para la vivienda. El nuevo Gobierno ha hecho hincapié en varias ocasiones en su pretensión de incrementar considerablemente el parque de vivienda social y asequible a través de la colaboración público-privada. Además, aún quedan muchos aspectos de la Ley de Vivienda por desarrollar durante esta legislatura.

La exsecretaria de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana dejó el ministerio en febrero de este año después del escándalo ferroviaria en los túneles de Asturias y Cantabria por los túneles que no entraban en la red. Antes de ser secretaria de Estado, Pardo ocupaba el puesto de presidenta de Adif, compañía en la que ingresó en el año 2007 a través de una Oferta de Empleo Público y tras haber trabajado en el sector privado de la ingeniería y consultoría de proyectos de infraestructuras ferroviarias y de carreteras.