Jupol insinúa que Interior prevaricó al trasladar a Moscú al escolta de Ábalos detenido

La mediación del exministro Jose Luis Ábalos con el Ministerio del Interior para que su escolta personal y hermano de uno de los principales investigados en el caso Koldo, Rubén de Aldama, fuese destinado en comisión de servicios a la Embajada de España en Moscú en 2021, con un sueldo que rondaba los 12.000 euros mensuales, tal como desveló THE OBJECTIVE, confirma «el enchufismo que existe en la Policía Nacional» en lo relativo a la asignación de este tipo de puestos; y «la opacidad» con la que se lleva a cabo el procesos de selección de los agentes, según ha denunciado el sindicato mayoritario de Policía, Jupol, en un comunicado, al que ha tenido acceso este periódico.

Esta organización sindical, que se ha hecho eco de la información que publicó este periódico el pasado fin de semana, advierte de que la designación del citado policía en la delegación diplomática «apunta a un presunto delito de prevaricación»: un ejemplo más «del amiguismo» que existe en el cuerpo, donde «los mandos utilizan los puestos en embajadas con total oscurantismo, atribuyéndolos a dedo y sin criterios objetivos». Prácticas que se realizan «desde hace años» en la Policía y que, «como ha quedado acreditado se siguen realizando ahora, con Fernando Grande-Marlaska al frente de Interior». 

Ábalos, según revelaron distintas fuentes policiales, intervino para que este agente, que había sido su escolta entre 2018 y 2021, estuviese durante al menos dos años en un puesto de seguridad en la Embajada de España en Rusia. El extitular de Transportes accedió a ello después de que el oficial de policía tejiese una relación de confianza con él y con su asesor, Koldo García, a quien la Audiencia Nacional investiga por delitos de cohecho, tráfico de influencias, organización criminal y blanqueo de capitales en la trama de las mascarillas. 

Entre tanto, aseguraron las mismas fuentes, el funcionario policial fue el nexo, a finales de 2018, entre el hombre de confianza de Ábalos, este último y su hermano, el empresario y presidente del Zamora F.C., Victor de Aldama, implicado también el caso de presunta corrupción. Los dos hermanos organización una comida a partir de la cual los cuatro forjaron una relación de amistad y negocios. Tanto es así que el exministro celebró su 60 cumpleaños, en diciembre de 2019, en el restaurante del empresario detenido, ubicado en una de las cinco torres de Madrid.

Pedirán explicaciones a Interior

«Motivos más que suficientes», prosigue Jupol, «para solicitar la dimisión del ministro del Interior al estar presuntamente vinculado con el caso de las mascarillas —su departamento adjudicó un contrato de mascarillas en 2020 a la empresa sobre la que pivota sobre la investigación judicial—, y por perpetuar el enchufismo injustificado durante su mandato». Por otro lado, el sindicato elevará en la próxima reunión del Consejo de Policía una pregunta en la que pedirá explicaciones por estos hechos y «solicitará por escrito los criterios para la atribución de los puestos de trabajado en Embajadas». También en el caso de De Aldama.

Para el acceso a un puesto de trabajo como policía nacional en una embajada en el extranjero es necesario contar, explican desde esta organización, con el curso de Seguridad en delegaciones diplomáticas que imparte el cuerpo y presentar un informe positivo del actual jefe del agente en cuestión que se postule para la plaza. Un documento que, advierte Jupol, «atenta contra los principios de igualdad y supone un criterio subjetivo y no basado en los méritos reales del trabajo policial». 

Además, remarcan, el destino del agente a una embajada «conlleva un suplemento salarial que va desde los 4.000 euros hasta los más de 20.000, en algunos casos». En el caso de la delegación española en Moscú, se trata de una de las más remuneradas de todo el mundo para la Policía Nacional. 

Sentencia de la Audiencia Nacional

En cualquier caso, los tribunales también se han pronunciado recientemente sobre este tipo de designaciones en el extranjero. En diciembre de 2022, la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional que anuló la asignación de cuatro comisarios para las embajadas de Bogotá, La Habana, México DF y Moscú, por falta de motivación de los nombramientos del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Una decisión que se hizo firme el pasado mes de enero de 2023.

En el fallo, adelantado por este periódico, los magistrados reconocen la falta de criterios en la atribución de los puestos de trabajo de policías nacionales en las Embajadas en el extranjero: «La Sala no puede alcanzar una solución favorable a la Administración, entendiendo, en efecto, que la resolución recurrida no se encuentra debidamente motivada al no ofrecer elemento explicativo alguno de la razón por la que prefirió a los candidatos elegidos en lugar del apelado». 

El tribunal dio la razón al sindicato habida cuenta de que la Dirección General de la Policía «no explicitó el conjunto de méritos» que le llevaron a elegir a los comisarios designados en la resolución. «La Administración se limita a exponer el curriculum de los elegidos, que tiene un contenido que puede ser equiparable al del ahora demandante, en lugar subrayar las especiales circunstancias que a aquellos han hecho preferibles», zanjaban los magistrados.