Por qué la libido de los hombres se dispara en verano: las razones que lo explican

Seguro que te has percatado de que llega el verano y tus ganas de sexo se disparan, tanto en el caso de los hombres como en el de las mujeres. Sí, estás más feliz y relajado, pero hay una explicación científica al respecto.

«En primer lugar es un tema de hormonas. El calor y la luz estimulan de forma natural las glándulas que segregan serotonina y otras hormonas del placer que contribuyen a nuestro bienestar. Por tanto, nuestros sentidos ya están más alerta. Si a eso añadimos el contexto del verano, cuando vamos menos vestidos, los cuerpos se revelan. El simple hecho de mostrar más la piel hace que el cerebro trabaje hacia una mayor excitación, erotizando más los cuerpos», asegura Ana Lombardía, sexóloga y terapeuta sexual de Lovehoney Group.

De hecho, «sentir el viento directamente sobre la piel, caminar descalzo por la arena o por la hierba crea estímulos adicionales, sensaciones que ayudan a despertar y excitar un poco más nuestro sistema nervioso y nuestros impulsos».

Pero esta subida de libido es especialmente llamativa en los hombres, ¿por qué? Lo vemos.

Por qué la libido de los hombres se dispara en verano

Como hemos visto, una mayor exposición a la luz solar da lugar a múltiples cambios en nuestro organismo. Especialmente, se genera un aumento en la producción de varias hormonas, tales como la oxitocina, la serotonina y la dopamina.

«El aumento de los niveles de estas hormonas, asociadas todas ellas al estado de ánimo, da lugar a unas sensaciones agradables que producen más energía, mejor humor y más ganas de sociabilizar, aumentando también de esta manera la pasión y las ganas de tener sexo», asegura a THE OBJECTIVE Alicia Rojas, psicóloga de Tranquilamente.

Y estas ganas de tener sexo se dan, sobre todo, en los varones, ya que los estudios indican que los rayos de sol provocan un aumento de hasta un 90% de la vitamina D. Y esta vitamina está íntimamente relacionada con la testosterona, que es la principal hormona sexual masculina (también presente en las mujeres, aunque en concentraciones diferentes).

Por lo tanto, «el aumento de la vitamina D debido a la exposición al sol hace que los niveles de testosterona incrementen y con ello que el deseo sexual sea mucho más elevado».

La testosterona baja es una de las posibles causas de la libido baja. Si la testosterona se reduce lo suficiente, prácticamente todos los hombres experimentarán una disminución en el deseo sexual.

Al respecto, un estudio realizado en Massachusetts, en hombres, identificó a aquellos que aseguraban tener bajo deseo sexual (el 11%). Tras ello, analizaron el nivel de testosterona de todos los participantes. ¿Resultado? Aproximadamente el 28% de los hombres con baja testosterona tenía una libido baja. Y eran hombres eran relativamente jóvenes, con una edad media de 47 años.

No todo es testosterona

En verano, ya sea en el caso de hombres o mujeres, se disparan las ganas de tener sexo. Tantas que hasta a uno mismo le sorprenden. Y hay muchas razones que lo explican. Detallamos las más relevantes:

• Aumento en la producción de las hormonas de la felicidad. Como hemos visto, una mayor exposición a la luz solar da lugar a múltiples cambios en nuestro organismo. Especialmente, se genera un aumento en la producción de varias hormonas, tales como la oxitocina, la serotonina y la dopamina, que son las encargadas de generar bienestar.
• Descenso de los niveles de melatonina, una hormona que puede bloquear las hormonas sexuales. De modo que, unos bajos niveles de melatonina pueden hacer aumentar nuestra libido.
• Disminución del estrés y ansiedad: los niveles elevados de estrés afectan a las hormonas, aumentando la producción de cortisol (la principal hormona del estrés) y reduciendo a su vez la producción de testosterona. Además, muchos estudios indican que el estrés es el principal inhibidor de la libido.
• Enseñamos más piel: como hemos comentado, tendemos a erotizar los cuerpos.
• Nos alimentamos mejor: nuestro cuerpo necesita hidratarse con alimentos más frescos, como ensaladas, frutas o zumos, que ayudan a la hidratación del organismo y «a su vez provocan una mejor circulación sanguínea y, con ello, se produce un incremento de la excitación», sentencia Rojas.
• Más sudoración: para algunos, la transpiración representa algo muy sensual, porque es en el sudor donde se concentran las feromonas, partículas volátiles, imperceptibles para el olfato consciente y que vienen a cosquillear los receptores del sistema olfativo y que tienen el efecto de desencadenar la atracción sexual.

El verano, la época ideal para dejarse llevar

Tras todo esto, podemos concluir que, efectivamente, el verano es la época del año en la que más apetito sexual se produce y, por tanto, más sexo se tiene. Así que sería el momento perfecto para probar algo nuevo o llevar a cabo esa fantasía que llevas retrasando tanto tiempo.

A más libido, más probabilidades hay de que salga bien. Y si no quieres probar nada nuevo, simplemente déjate llevar y hazlo más y mejor, ya que antes de que te des cuenta estamos otra vez con el abrigo y el paraguas.