Llega el Zeekr X, un SUV de alma europea y cuerpo chino que avisa a las marcas prémium

Sonidos de perros, gatos, el de un deportivo o hasta tu propia voz. En lugar de claxon, el Zeekr X puede hacer sonar todo eso a través de sus altavoces externos. Esta es la anécdota; la clave es su calidad y detalles propios de coches que costarían mucho más. La marca china, creada en 2021, se tira en plancha al mercado prémium y tira de la barba a marcas de referencia. 

Derivado del Volvo X30 eléctrico, este SUV de tamaño medio —4,43 metros— eleva el listón del segmento con una calidad extraordinaria y poco frecuente en vehículos de menos de 50.000 euros. Desarrollado en Ámsterdam, y tamizado por el estudio de diseño que posee la marca en Suecia, muy cerca de donde lo hace Volvo, no puede negar su alma europea a pesar de estar fabricado en China. 

El gigante Geely asalta el goloso mercado del viejo continente con un producto que rebosa calidad, y que se une al 001, su hermano mayor. Añaden a esto un diseño que no tiene mucho que ver con muchos de los productos asiáticos habituales; no es un chino venido hasta aquí, sino un europeo montado allí.

Con sus líneas angulosas, su original grupo óptico delantero, mucha línea recta y detalles minimalistas, se aleja de las curvas, redondeces y volúmenes a veces hiperbólicos que tanto gustan en Asia. Basado en su primo, el X30, es algo más grande, y con mayor distancia entre ejes. Su techo logra un efecto flotante, con una cintura muy alta, superficie acristalada relativamente pequeña, y las ventanillas traseras tintadas. Trae de serie llantas de 19 pulgadas, aunque ofrece la opción de 20, todas envueltas en pasos de rueda muy generosos, con los rebordes tintados en negro brillante, lo que le aporta cierta elegancia.

En acabados altos hay una pequeña pantalla en el pilar B, el situado entre la puerta delantera y la trasera. Este curioso gadget muestra el estado de recarga mientras está enchufado, e indica la temperatura del interior si el vehículo está cerrado y hay animales (o personas) dentro. El modo de uso se denomina Pet Mode, y activa el climatizador. A más de uno le encantaría ir a echarse una siesta en pleno agosto con esta utilidad en marcha. 

El X muestra orgulloso su nombre iluminado con efecto 3D en la parte trasera, justo entre la luneta trasera y el cierre del portón. Llama la atención el tamaño de sus intermitentes dinámicos traseros, a diferencia de otras marcas, que parecen querer reducirlos a la mínima expresión. Tras la portezuela, hay un maletero de 362 litros, no excesivamente generoso. A cambio, ofrece un pequeño hueco bajo el suelo, y uno mínimo, solo para cables, bajo el capó delantero.

Se puede abrir a través no de uno, ni de dos procedimientos, sino de tres. El normal debería ser la llave con forma de tarjeta, y también puede usarse un teléfono móvil. La tercera opción viene en forma de un extraño mando a distancia de forma piramidal que alberga diversas funciones. 

Interior de lujo

Minimalista y delicado. Esa es la sensación que transmite desde el primero momento el Zeekr X. Aprovecha la experiencia de Volvo en cuanto a acabados y dan un salto un poco más allá. Los asientos con piel sintética vegana destilan calidad, con sus posibilidades de calefacción y ventilación. Apenas hay botones, y casi todas sus funciones pasan a la pantalla táctil de 14,4 pulgadas horizontal. Casi, porque en el volante hay dos botones, dos mandos, para que nadie se líe. Son configurables y se pueden colocar los controles de la radio o la temperatura. 

La otra pantalla, la del conductor, es de 8,8 pulgadas y se mueve de modo solidario con la columna de la dirección. Si se sube o baja el volante, no se perderá de vista, pero si te supiera a poco, tienes un Head up display. El sonido está a cargo del fabricante Yamaha, que ha decidido distribuir trece altavoces por toda la fisonomía del X. 

Propulsión 

El X se vende en dos versiones, una de tracción trasera con 200 kW (268 CV), que acelera de 0 a 100 km/h en 5,6 segundos. Homologa en ciclo WLTP 445 kilómetros de autonomía. La superior, con dos motores y tracción a las cuatro ruedas, desarrolla 312 kW de potencia (422 CV). La marca afirma que hace 425 kilómetros, y acelera de 0 a 100 en unos impresionantes 3,8 segundos. Ambos equipan una batería de 69 kWh brutos, que tarda algo menos de media hora en cargar desde el 10 al 80%. 

La marca Zeekr sigue la estela de Tesla, y ofrece versiones de acceso bastante completas, sin un delirio de opciones. Simplifican la producción y es una excusa perfecta para cobrar un poco más por sus modelos más baratos. Hablando de precio, el Long Range, de un solo motor, cuesta 44.990 euros, y el Privilege, con tracción a las cuatro ruedas, 49.490 en el mercado holandés. De momento solo se venden en Suecia, Alemania y Países Bajos, y no tardarán mucho llegará a España a esos precios. Lexus, BMW, Audi, Mercedes, y Porsche tienen a un rival duro. Y (relativamente) barato.