Prisión sin fianza para la acusada de incendiar una treintena de coches en Tuy (Pontevedra)

Una mujer de 52 años de edad ha sido condenada en Tuy, Pontevedra, a prisión provisional, comunicada y sin fianza, por un delito de daños con riesgo para las personas. Se le acusa de quemar cerca de una treintena de vehículos de madrugada, en la propia localidad de la que es nativa y residente.

La Guardia Civil ha argumentado desencuentros familiares como causa del acto que provocó la acusada. Tal y como relatan diferentes vecinos de la localidad, pertenece a una familia muy conocida en Tuy, y no tiene buen trato con sus hermanas.

Cabe destacar que la acusada ha pasado a disposición judicial menos de 24 horas después de que hubieran sucedido los hechos que ella misma provocó. Así, habían resultado fundamentales las imágenes de las cámaras de seguridad que están instaladas por todo el casco antiguo de la ciudad.

Gracias a la visualización de estos archivos, la Guardia Civil pudo detener unas horas después a la presunta autora de los hechos. Unos 21 vehículos resultaron quemados, mientras que otros tantos fueron dañados por el fuego, y una vivienda colindante quedó afectada.

Vecinos de la zona comenzaron a realizar diversas llamadas a emergencias aquella madrugada, alrededor de las tres y media de la mañana. Esa fue la voz de alarma para que las fuerzas de seguridad, así como las sanitarias, supiesen que un importante número de vehículos estaban, simultáneamente, en llamas en la localidad.

Gran movilización

Entre tantas llamadas alertando sobre la situación, se vio adecuado movilizar el máximo número de equipos posibles para apagar el fuerte incendio; por ello, también acudieron medios y equipos de rescate portugueses. Así, Bomberos de Valença (Portugal) se movilizaron hacia la zona junto a diferentes equipos españoles.

Éstos fueron: bomberos del Baixo Miño y Ponteareas, miembros del GES de Mos, así como varios voluntarios de Protección Civil de Tui, Salceda y Tomiño. Fue una noche calificada como «horrible» por los vecinos, que observaban preocupados como los bomberos y equipos de rescate trabajaban para sofocar le fuego cuanto antes.

La culpable, espectadora de lujo

Resulta curioso que la propia autora intencional del incendio presenció todos los esfuerzos de los equipos por apagar las llamas. Llegó incluso a participar en una entrevista para un medio de comunicación, en la que calificaba como «guerra» la noche sin tregua para los bomberos.

Por otra parte, admitió que «los coches se derretían», y que «el humo era espantoso». Se encontraba, por tanto, como cualquiera de los otros vecinos de la localidad, mostrándose visiblemente preocupada por los hechos. Sin embargo, de poco le sirvió cuando la Guardia Civil realizó el visionado de las imágenes de las cámaras de seguridad, que la delatan como culpable del aparatoso incendio.