Liverpool FC: el club que bautizó y consagró a Vinicius Jr.

Si es usted madridista, agárrese, porque vienen curvas. Los próximos 10 días traen consigo a tres rivales de enjundia: Liverpool, Atlético de Madrid y FC Barcelona se verán las caras con el Real Madrid en un trío de competiciones diferentes. Esta noche, los acordes del himno de la Champions sonarán en Anfield para rememorar la última final europea. El derbi liguero del sábado plantará por segunda vez a los de el Cholo en Chamartín en menos de un mes y, además, con ánimo de revancha. Y el jueves 2 de marzo, turno para la ida de la Copa del Rey en el estadio Santiago Bernabéu.

El Barça de Xavi medirá el índice de recuperación merengue tras el varapalo que le infligió en Arabia durante la final de la Supercopa de España. Un menú futbolero intenso que tiene «extramotivada» a la plantilla que dirige Carlo Ancelotti. Un equipo que, mira de reojo a lo que tiene por delante, pero, sobre todo, se centra en sacar «un buen resultado en Inglaterra». Como dicen desde dentro «lo más importante es lo más inmediato y lo más inmediato es la Champions». 

El Liverpool dibuja sonrisas 

Durante una época fue todo lo contrario. Escuchar la palabra Liverpool despertaba pavor. Agustín, Camacho, del Bosque, Santillana… cualquiera de estos mitos podría relatar el trauma que supuso perder la final de la Copa de Europa del 81 contra el conjunto red. Los Kenny Dalglish, Graeme Souness y compañía, comandados por el mítico Bob Paisley desde el banquillo, se cargaron el sueño de toda una generación.

Fue tal el impacto en el imaginario colectivo que, a pesar de no volverse a ver las caras hasta 28 años después, el canguelo permanecía intacto. Para todos salvo para el entonces presidente en Concha Espina, Vicente Boluda. El efímero mandatario pronosticó que la eliminatoria frente a los ingleses sería «un chorreo» a favor del Real Madrid. Y efectivamente, hubo chorreo, pero del Liverpool a los blancos. Era el 10 de marzo de 2009 cuando el spanish Liverpool de Benítez, Reina, Arbeloa, Xabi Alonso y Fernando Torres destrozaba al Madrid de Juande Ramos por 4 goles a 0 en Anfield. El global de la eliminatoria se saldó con una dolorosa ‘manita’ (5-0). Esa sería la última ocasión en la que los británicos harían claudicar a los madrileños. Desde entonces, cada vez que se han enfrentado al Real Madrid, no han hecho otra cosa que dibujar sonrisas.

Y no en pocas ocasiones. El caprichoso bombo continental nos ha regalado hasta seis Real Madrid vs Liverpool desde 2014. El bagaje es sensacional para los del Paseo de la Castellana: cinco victorias y un empate. Aquí están incluidas dos finales de Champions, y aquella de 2018 en Kiev evoca recuerdos de todo tipo. El gol de chilena de Gareth Bale es, probablemente, el mejor tanto logrado en una final de la Copa de Europa. Los errores de Karius, por groseros, acabaron con la carrera del prometedor portero. Y la bomba de Cristiano Ronaldo, anunciando que se iba tras el pitido final, todavía deja un regusto amargo entre el madridismo. Y es que un duelo de estas características puede hundirte en lo más hondo o elevarte a los altares, como le sucedió a Vinicius Junior.

Y Vinicius se hizo hombre 

Podemos asegurar, sin temor a equivocarnos, que el Liverpool transformó al Vinicius niño en el Vinicius hombre que todos conocemos. Además, me consta que así lo siente el futbolista brasileño. Allá por abril del 2021, Vini andaba tocado en su orgullo. Las bromas por su escasa puntería ante la portería rival lo habían convertido en un meme entre los aficionados rivales. En casa las cosas no andaban mucho mejor. El madridista de a pie dudaba de su valía, e incluso el mismísimo Zinedine Zidane titubeaba en su apuesta por el joven talento. 

Todas esas sospechas se cerraron de un plumazo cuando el de São Gonçalo tuvo a los reds en frente. Eran los cuartos de final, se trataba su gran oportunidad y no la iba a desaprovechar. Doblete en la competición más prestigiosa del mundo con un primer gol de ensueño. Bajar un pase de 40 metros con el pecho, en velocidad y rematar de primeras para inaugurar el electrónico de Valdebebas estaba al alcance de muy pocos. Un gol de bandera que se complementaría con un segundo tanto ajustado al palo tras recibir la asistencia de Luka Modric. Vinicius Junior se presentaba al mundo del fútbol.

El último capítulo lo conocen de sobra. Con solo 21 primaveras, Vinicius daba la victoria al Real Madrid en la pasada final de la Champions League con su solitario gol. El Liverpool fue, primero, su bautismo como jugador prometedor, y después, su consagración como crack. ¿Será capaz de repetir hazaña?