Feijóo renuncia al plan de Casado de presentar una candidatura española al PPE
El próximo líder del PP se decanta por Manfred Weber después de que el alemán se desmarcase de las polémicas palabras del polaco Donald Tusk sobre Vox
Alberto Núñez Feijóo y Pablo Casado. | EP
El próximo presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha renunciado a presentar una candidatura española para la presidencia del Partido Popular Europeo (PPE), un puesto que deja el polaco Donald Tusk en mayo. Pablo Casado quería promocionar a Antonio López-Istúriz, actual ‘número dos’ del PPE en su condición de secretario general, pero Feijóo se decanta ahora por apoyar la candidatura del alemán Manfred Weber, según fuentes populares consultadas por THE OBJECTIVE.
Weber ya ha oficializado su candidatura y por el momento es el único candidato en liza para el congreso de Rotterdam (Países Bajos) que se celebrará el próximo 31 de mayo, una condición que fue resaltada este lunes en Génova por fuentes del comité organizador del congreso de Sevilla.
El alemán ostenta en la actualidad el cargo de presidente del grupo del PPE en la Eurocámara, por lo que varias formaciones de la familia de los populares europeos ven excesiva esta concentración de cargos en una sola persona. De ahí que Casado tuviera en mente -antes de la crisis interna del PP- el proponer a López-Istúriz para el puesto que ha desempeñado Tusk en los últimos años.
El eurodiputado español lleva 20 años como secretario general del PPE, fruto de un pacto impulsado en su momento por José María Aznar y Silvio Berlusconi. Así que con sus dos décadas en dicho puesto, cuenta con buena interlocución con los presidentes de los partidos que forman el PPE, quienes tendrán la última palabra sobre el sustituto de Tusk en la votación de Rotterdam.
El PP llama por teléfono a Weber
Feijóo se ha decantado por Weber tras el respaldo que este último dio al PP la pasada semana después de su pacto con Vox en Castilla y León. El alemán salió al paso de unas polémicas declaraciones de Tusk en la cumbre del PPE en Versalles (Francia) a la que asistió Casado y en las que el expresidente del Consejo Europeo mostró su disgusto por la «capitulación» de los populares españoles con la formación de Santiago Abascal.
Tras la desautorización de Tusk, el presidente del comité organizador del congreso del PP, el también eurodiputado Esteban González Pons, llamó por teléfono a Weber para que se desmarcase del presidente saliente del PPE. «El PP es la alternativa creíble a la izquierda en España. ¡Feijóo tiene todo nuestro apoyo!», afirmó en las redes sociales cuando las palabras de Tusk sobre el pacto con Vox estaban en boca de un buen número de dirigentes populares.
Tras ello, se ha conocido que Weber será uno de los tres dirigentes del PPE que participen en el cónclave de Sevilla junto a la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola; y el vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas. En Génova hay malestar con Tusk porque este lunes se subrayó que, pese a estar invitado, no se prevé su asistencia al congreso del PP ya que «en los últimos meses apenas sale de Polonia», al estar centrado en las futuras elecciones polacas en las que confía en sacar del poder al PiS, el partido ‘gemelo’ de Vox.
Por ello, la dirección provisional del PP hizo hincapié en que Tusk valoró el pacto en Castilla y León en «el contexto suyo» ya que se prepara para los comicios generales en su país y su política consiste en «demonizar» al actual Ejecutivo de Varsovia, gobernado por el PiS.
Reunión de Casado con González Pons
González Pons podría ser una alternativa a López-Istúriz ahora que Feijóo se dispone a tomar las riendas del PP, pero el primero se ha descartado de la carrera por la sucesión de Tusk después de sus fracasos para dirigir el grupo del PPE en la Eurocámara y, más recientemente, su intento por presidir el Parlamento Europeo.
Su condición de vicepresidente del grupo de los populares europeos hizo que el nombre de González Pons sonase como posible candidato del PPE al puesto de presidente de la Eurocámara que el socialista David Sassoli tenía que dejar en enero de este 2022. Sin embargo, González Pons no presentó en noviembre su candidatura al no contar con el respaldo de Casado, tal y como desveló THE OBJECTIVE en noviembre.
El líder del PP le hizo ver unas semanas antes en una reunión a solas que no tendría opciones de sustituir a Sassoli, por lo que evitó promocionar su candidatura entre los populares europeos. En el equipo de Casado fueron muy escépticos con sus posibilidades mientras Iratxe García estuviese como presidenta del grupo parlamentario de los socialistas europeos. Precisamente, la española fue reelegida al frente de los Socialistas y Demócratas (S&D) -el segundo grupo de la Eurocámara con 146 miembros- al no presentarse otros cargos para el puesto.
Este hecho cerró completamente la puerta de la presidencia de la Eurocámara a González Pons ya que los socialistas españoles nunca votarían a favor de él en enero y podrían arrastrar a otros muchos del S&D en su oposición. Así se lo hizo ver Casado a su eurodiputado cuando se reunieron en septiembre para analizar sus opciones. González Pons reconoció en ese momento que sus posibilidades solo pasaban por la salida de García, algo que finalmente no ocurrió.
