El PP andaluz roza la absoluta en las encuestas y se abona a la esperanza de gobernar en solitario

El Partido Popular (PP) ganaría con holgura las elecciones del 19 de junio en Andalucía y superaría la hegemonía del Partido Socialista en la comunidad, vencedor de los últimos comicios y partido gobernante hasta la actual legislatura. Juan Manuel Moreno Bonilla lograría aglutinar más votos que toda la izquierda en conjunto e incluso llegaría a rozar la mayoría absoluta que permitiría un Gobierno en solitario que no tendría que contar con Macarena Olona y Vox.

El lunes nace con varias encuestas en los principales diarios nacionales (las últimas que podrán publicarse según la ley electoral) que apuntan en una misma dirección: la victoria de los populares. La que cuenta con una lectura más positiva en Génova 13 es la del diario ABC con GAD3, que deja a Moreno Bonilla a solo dos representantes de la absoluta (fijada en los 55) y acerca el anhelo del candidato de no depender de otros partidos para alcanzar el Palacio de San Telmo. La izquierda en conjunto no lograría sumar más que Moreno, con el PSOE como segunda fuerza (33) y con Por Andalucía y Adelante Andalucía muy por detrás (4 y 3 respectivamente).

En el mismo sondeo, la derecha contaría con otros 16 representantes provenientes de Vox, mientras que Ciudadanos seguiría la estela de los procesos autonómicos celebrados este año y se abonaría a la desaparición en la cámara autonómica.

Menos celebrable para los populares es la encuesta de 40dB para El País, que vuelve a entregar la victoria a la derecha, aunque con mucha más distancia de la absoluta que en el anterior sondeo (48 diputados, a siete de esta mayoría). Con respecto a la posición del PSOE, coincide con la anterior y le otorga 33 representantes que le colocarían como segunda fuerza, a 15 de los 18 parlamentarios que obtendría Macarena Olona.

Este sondeo también apuesta por la desaparición de Ciudadanos y por la superioridad de la coalición Por Andalucía a la izquierda de los socialistas, que se impondría con una ventaja de cuatro diputados con respecto a Adelante Andalucía (siete y tres representantes).

También La Razón ha publicado sus estimaciones electorales, que sí que premian a Ciudadanos con un asiento que correspondería al actual vicepresidente de la Junta, Juan Marín. Por parte de los grandes partidos, los populares rozarían los 50 escaños (entre 48 y 50) mientras que los socialistas se quedarían en la horquilla de los 31 y los 33 representantes. De seguido se encontrarían Olona y Vox, que sumarían entre 16-17 escaños, con la izquierda muy por detrás, con Por Andalucía como primer partido en este sector y con Adelante Andalucía aún distanciado (6 a 8 y 3 a 4, respectivamente).

Los diarios digitales mantienen la tendencia

Por la mañana, los diarios El Confidencial y El Debate abren sus ediciones digitales con sondeos sobre las elecciones en Andalucía en la que ambos entregan la victoria a Juan Manuel Moreno Bonilla, aunque con diferentes estimaciones. Mientras que el primero dispara al candidato popular a tan solo dos de la absoluta (entre 50-53), el segundo pone freno a la expectativas y pone el listón entre los 43 y los 45, a 10 de un Gobierno solitario y dependiente de un Vox que sacaría entre 14 y 16 en El Confidencial y con el mejor resultado para Vox en una encuesta según El Debate: entre 20 y 22, siendo esencial para conjugar un Ejecutivo.

En las demás formaciones, ambos medios coinciden en los malos resultados del PSOE (28-30 y 30-32, por debajo de los resultados de 2018 y con un Juan Espadas que a pesar de ser la apuesta personal del presidente Pedro Sánchez no logra sumar más que Susana Díaz). También apuntan un mismo resultado para Por Andalucía (entre ocho y diez) y se asemejan en el de Adelante Andalucía (con cuatro representantes en el mejor de los casos) y en el de Ciudadanos (entre cero y tres).

Un Gobierno del PP con la abstención del PSOE, el preferido

Una vez se conozcan los resultados que arrojen las urnas, quedará sacar la calculadora si todo se mantiene en el equilibrio que ha ido mostrándose a lo largo de la campaña y que señalaba a la necesidad de pactos para alcanzar un Gobierno.

La combinación más probable en caso de ser necesario pasa por un acuerdo a lo Castilla y León, en el que Vox pasaría a formar parte del Gobierno como bastón de apoyo a pesar del mantra que han venido repitiendo en los mítines celebrados en el que, con sorna, tildan a Moreno de «vicepresidente», puesto que probablemente ocupe Olona. Esta alternativa es la favorita para el electorado de Abascal, que como señala Vozpópuli cuenta con el visto bueno de más del 94% de los consultados.

Sin embargo, si se le realiza esta misma pregunta a los votantes populares, estos apuestan por apartar a Vox del Gobierno en favor de un acuerdo para la abstención del PSOE que permitiría, si nada cambia, un Ejecutivo en solitario de Moreno Bonilla con acuerdos en determinados puntos de la legislatura (algo apoyado también por un 26,9% de los electores consultados).

Los votos del electorado de Ciudadanos ‘bailan’ hacia la derecha

Los 21 representantes de Ciudadanos cosechados en 2018 ya son historia, algo que se ha venido repitiendo en los procesos electorales que se han venido celebrando en Madrid (desaparecidos), Castilla y León (un solo asiento) o Cataluña (seis). En esta crisis que atraviesa la formación de Inés Arrimadas, el principal beneficiado es el Partido Popular, que se quedaría con un 45,3% de los votantes de los naranjas, esenciales para una posible victoria que roce la absoluta. De este golpe también se beneficia Vox, que acapara más de un 9% de los antiguos votantes.

Sin embargo, la parte más interesante de este dato se encuentra en el más del 12% de este segmento del electorado que aún no ha decidido su voto, que podría decantar una victoria en solitario para el PP o ponerle presión a Moreno para pactar el Ejecutivo.

Sea cual sea el resultado del domingo 19 de junio, parecen claras varias certezas. El Partido Popular ha roto la baraja andaluza y ha cambiado el tablero electoral, dominado por la izquierda hasta el momento. Por su parte, Vox se ha afianzado como tercera fuerza que se impone a una izquierda fragmentada y que no logra aglutinar a pesar de las coaliciones.