Sánchez exige a Montero la destitución de Victoria Rosell por el fiasco del 'sí es sí'

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha exigido a Yolanda Díaz que interceda para que «caiga una cabeza» en el equipo de la ministra de Igualdad por el caos del solo sí es sí. Fuentes conocedoras de esta exigencia explican en conversación con THE OBJECTIVE que el líder del Ejecutivo ha pedido a la ministra de Trabajo que traslade a la ministra Irene Montero la necesidad de que una de las personas de su confianza deje el cargo después del aprobación de la modificación de la Ley de Libertad Sexual, tras más de 500 casos de revisiones de condenadas a agresores sexuales y después de la dimisión de dos altos cargos del Gobierno por los trenes en Asturias y Cantabria.

Las fuentes consultadas apuntan directamente a la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, y afirman que su cese se debería ejecutar «después de la aprobación de la modificación de la ley del solo sí es sí». La ministra de Trabajo ha dado su visto bueno a la operación, según explican fuentes conocedoras de la petición de Sánchez, aunque detallan que se ejecutará después de la aprobación en el Congreso de la modificación de la Ley de Libertad Sexual.

Los tiempos son un elemento clave en la operación. El presidente del Gobierno quiere que la ministra de Igualdad prescinda de una de sus principales colaboradoras. En la Moncloa señalaron en un primer momento a la secretaria de Estado Ángela Rodríguez Pam, aunque los emisarios de Irene Montero dieron a entender que su cese significaría de inmediato «una crisis de Gobierno». El nombre de Rodríguez Pam estuvo también encima de la lista de Yolanda Díaz, quien ejerce de puente entre la Moncloa y el Ministerio de Igualdad.

Según las fuentes consultadas, Díaz dio su visto bueno al alejamiento de Rodríguez Pam, que llegó a formar parte del equipo de Montero después de un pasado como referente de la corriente errejonista en Galicia. Sin embargo, tanto Sánchez como Díaz se toparon con la negativa tajante de Montero. Para la ministra de Igualdad la secretaria de Estado es algo parecido a una intocable. De ahí que los hombres de confianza de Sánchez y los de Díaz desviaran sus ataques hacia la juez Vicky Rosell. «Ella fue la autora de la ley del solo sí es sí», explican las fuentes consultadas conocedoras de la exigencia de Sánchez.

Retraso por el ataque del PP

El pasado martes, el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, preguntó al presidente del Gobierno por posibles ceses de cara al fracaso de la ley del solo sí es sí. Las fuentes consultadas sostienen que este movimiento de Feijóo hizo que Sánchez asumiera que para los ceses en el equipo de Igualdad había que esperar tiempo. «Hay que esperar porque si no, un cese en el equipo de Montero se puede convertir en un éxito del PP», explican las fuentes consultadas. «El PP lo sabe. Por eso Feijóo dijo lo que dijo en el Senado el martes», añaden.

De ahí que la Moncloa maneje los tiempos con la mirada puesta en la aprobación de la modificación de la ley del solo sí es sí. Es decir, que el Ejecutivo quiere que Montero retoque su equipo solo «después» de la aprobación de dicha modificación, para que no se interprete que el cese es una victoria política del PP. Esto significa que Sánchez quiere que Montero renuncie a una de sus principales colaboradoras antes de las elecciones autonómicas y municipales de mayo, pero después de que el Congreso vote la modificación de la Ley de Libertad Sexual.

En Podemos recuerdan que la relación entre Montero y Rosell es «mejorable» desde hace tiempo. La juez canaria aspiró al cargo de secretaria de Estado después de la salida de Noelia Vera. Montero, sin embargo, prefirió nombrar a Rodríguez Pam, generando el enfado de Rosell. De ahí que la ministra de Igualdad pueda finalmente dar su visto bueno a su cese para salvar a su principal colaboradora, una pieza clave en el enfrentamiento con Yolanda Díaz debido a sus contactos e influencias en Galicia. Rodríguez Pam es originaria de Pontevedra y considerada una de las dirigentes más fieles y leales a Montero.

Vicky Rosell, en la cuerda floja

Lo que no es negociable, según las fuentes consultadas, es un cese simbólico en el equipo de Irene Montero. El pasado lunes dejaron el cargo el presidente de Renfe y la secretaria de Estado de Transportes por el caos de los trenes en Asturias y Cantabria. Estos ceses anticipan otra remodelación en el equipo de Irene Montero, según aseguran las fuentes consultadas, aunque explican que los ataques del PP han tenido el efecto de aplazar dicha maniobra.

La modificación de la ley del solo sí es sí se debatirá en el Congreso el próximo 7 de marzo. A partir de ese momento, los grupos parlamentarios deberán aceptar o rechazar unos cambios que el PSOE quiere ofrecer a su electorado como la demostración de su responsabilidad antes los «errores» cometidos, según asumió el propio Sánchez en la Cámara Baja y el Senado. Podemos buscará incluir una enmienda al texto del PSOE, aunque oficialmente los socialistas trasladan que están dispuestos a ir adelante con o sin el apoyo de los morados. Pase lo que pase en el Congreso, Sánchez ha trasladado a Yolanda Díaz su orden de que Montero deberá renunciar a un miembro de su equipo. Todas las miradas están puestas en la juez Rosell.