«Me sorprende mi capacidad de horrorizarme ante las escenas de sexo de las series más juveniles porque hasta las madres más progres corremos el riesgo de volvernos moralmente ultraconservadoras»
Va a ser un auténtico milagro si una docena de hombres justos, lúcidos, luchando todavía por la libertad y la santidad, sobreviven a este empacho de mestizajes de totalitarismos.