El “caso Soria bis” ha sido la guinda de la indecencia, la cobardía y la irresponsabilidad de Rajoy. Al final, ya lo han visto, Rajoy le endilga la responsabilidad a Luis de Guindos, que la tiene sin duda, pero siempre por detrás del presidente en funciones. Guindos es ya un cadáver, y Rajoy un incompetente peligroso empeñado en mantenerse donde no debe estar. Con lo de Soria, además de cometer un error inaceptable, Rajoy volvió a mentirnos. Pero como si nada, se instala la cara de “yo no fui” y que vengan más. Total son ya muchos casos de mierda acumulada y quedan a beneficio de inventario. El a lo suyo, que nunca es lo nuestro.