La Agencia de Salud Pública de Sánchez, en manos del PP, que pugnará por su sede

La aprobación de la primera ley sectorial del Ministerio de Sanidad cae en manos de la oposición. La aclamada Agencia Estatal de Salud Pública (AESP) queda en el aire tras las enmiendas a la totalidad presentadas esta semana por Junts y PNV. A día de hoy, la aprobación de la ley por la que se crearía la Agencia –aprobada ya por el Consejo de Ministros y actualmente en fase de presentación de enmiendas–, depende del Partido Popular que, según fuentes próximas al grupo político, podrían salvarla a cambio de su sede.

Este lunes, los nacionalistas vascos presentaban una enmienda de devolución, ya que a su parecer invade competencias autonómicas. De esta forma, señalan que el actual proyecto –hecho desde la legislatura pasada– «podría entrar en conflicto con la normativa autonómica». Además, destacan que el texto, «tiene una total falta de clarificación en la definición en lo relativo a los fines y funciones del órgano propuesto», y señalan que «no concreta nada sobre su estructura y funcionamiento».

En este mismo sentido, para Junts per Catalunya el proyecto de ley «olvida» que corresponde a la Generalitat, en materia de sanidad y salud pública, la «competencia exclusiva» sobre la organización y el funcionamiento interno, la evaluación, la inspección y el control de centros, servicios y establecimientos sanitarios y la ordenación farmacéutica.

«Dado que la coordinación presupone el ejercicio de competencias por parte de las comunidad autónomas en materia de sanidad, el Estado, al coordinarlas, tiene que respetarlas», han apuntado en el texto de su enmienda.

Comunidades ‘populares’

De esta forma, en los próximos días, ambas enmiendas se debatirán en el Congreso de los Diputados, de forma que, si el Partido Popular vota a favor de estas –-al tratarse de una enmienda de devolución es muy probable que tanto el PP como Vox voten a favor–- , el proyecto de ley se devolverá al Gobierno –al no conseguir mayoría simple–. En cambio, si PP se abstiene o vota en contra, la normativa seguirá su tramitación.

Así las cosas, el paso de PNV y Junts obliga al Ejecutivo a negociar con la oposición que, según fuentes próximas al PP, tendrían ‘la sartén por el mango’ para pactar la tramitación de la ley a cambio de que la sede de la Agencia Estatal de Salud Pública –la joya de la corona– se adjudique a alguna de las comunidades populares. El Partido Popular registró hace apenas unos días en el Congreso una PNL para instar al Gobierno a poner en marcha «de forma efectiva» la Agencia Estatal de Salud Pública «antes de que termine el año 2024». 

De este modo, la ministra de Sanidad, Mónica García, recibe ahora un golpe de realidad al tener que hacer frente por primera vez a la actual situación parlamentaria que, para sacar adelante cualquier ley, necesita contar con todos sus socios. Y es que García es una de las titulares que más leyes ha prometido de todos los ministros, como la modificación de la ley del Medicamento, las de Universalidad – Equidad, la de alcohol en menores o la de Salud Digital. Leyes cuya tramitación podría caer simplemente con que uno de sus socios no esté de acuerdo con algo.

La sede, la joya de la corona

Desde que este proyecto se dio a conocer por parte del Ejecutivo nacional han sido muchas las comunidades autónomas que han mostrado su interés por albergar su sede. Los diferentes gobiernos regionales han puesto sobre la palestra la idoneidad de ciudades como Murcia, Granada, Zaragoza, La Coruña, León, Valencia o alguna ciudad de Asturias.

Este mismo miércoles, la Consejería de Salud y de la Junta de Andalucía ha anunciado que ya ha iniciado las sesiones de trabajo de los cuatro grupos designados para elaborar el documento de la candidatura de la ciudad de Granada para albergar la futura sede. Y es que la ciudad nazarí, territorio en comunidad autónoma de los populares, es una de las principales competidoras junto con Zaragoza, también ciudad en comunidades autónomas del PP.

El Ministerio de Política Territorial, que todavía no ha establecido los criterios de elección, será el encargado de la última decisión sobre la ciudad que albergará la Agencia Estatal de Salud Pública. Así, con el proceso de presentación de sedes todavía abierto para todas las comunidades autónomas, no se descarta la candidatura de Madrid (PP).

La agencia, según informó la titular de Sanidad en su primera comisión el pasado enero, no solo coordinará respuestas a emergencias, «sino que también guiará el desarrollo de políticas de salud pública y será un recurso clave para la capacitación de profesionales preparándolos para enfrentar los desafíos del futuro». «Esta agencia será el núcleo de una colaboración más estrecha y efectiva entre diversas entidades, que van desde administraciones públicas hasta profesionales de la salud».