Expertos británicos piden cancelar la Navidad y trasladar las celebraciones a verano

Varios científicos británicos del grupo Independent SAGE alertan de que la Navidad puede ser el detonante de una tercera ola de la pandemia de coronavirus[contexto id=»460724″], así que han pedido al Gobierno que cancele todo tipo de celebraciones y, a cambio, las sustituya por unas vacaciones en verano.

Por qué te lo contamos: según publica Mirror, estos científicos advierten de que las tasas de casos de todo el país se dispararán en enero a menos que se abandone la Navidad. Los expertos concluyen que el NHS (Servicio Nacional de Salud de Reino Unido) podría verse colapsado por una tercera ola mientras aún se están recuperando de la segunda. 

«Se debe enfatizar en que, si todos eligen aprovechar la regla de los tres hogares, existe un peligro muy serio de una tercera ola de la pandemia», dice una fuente de este organismo. La regla de los tres hogares, propuesta por el Gobierno de Reino Unido, permitiría que tres grupos diferentes de convivientes puedan formar una única burbuja de convivencia entre el 23 y el 27 de diciembre.

Ahora bien, si los ciudadanos piensan reunirse de todas formas dentro de las condiciones permitidas, Independent SAGE propone que se establezca una «asignación energética para la pandemia» para cubrir las facturas de calefacción. De esta manera, las familias, independientemente de su nivel económico, podrían mantener las ventanas y puertas abiertas durante la Navidad sin pasar frío.

Las recomendaciones de los expertos británicos llegan en un momento complicado para Reino Unido: este lunes, el ministro británico de Sanidad, Matt Hancock, ha anunciado que una «nueva variante» de COVID-19 se está propagando con gran rapidez en las islas, especialmente en el sur de Inglaterra.

En la misma comparecencia, el ministro ha anunciado que Londres, así como ciertas zonas de los condados de Essex (al este de Inglaterra) y Hertfordshire (al norte de Londres), pasan al nivel máximo de alerta. Esto implica nuevas restricciones, como el cierre de la hostelería salvo para entrega a domicilio o la prohibición de encuentros sociales entre diferentes núcleos de convivencia, excepto si se dan en el exterior y con un máximo de seis personas.