La vuelta de la comisaria Vestager complica el plazo para aprobar la fusión Orange-MásMóvil

Los plazos de la aprobación de la fusión de Orange con MásMóvil vuelven a complicarse en la recta final de la operación. Las fuentes del sector consultadas por THE OBJECTIVE indican que la vuelta de Margrethe Vestager como comisaria europea de Competencia dilatará la resolución final del proceso más allá del primer trimestre de 2024 e incluso hay riesgo de que se vaya hacia finales del semestre, dependiendo de las modificaciones o cambios que la Comisión Europea pueda realizar al acuerdo de venta de activos alcanzado entre la joint venture y Digi.

Las partes involucradas habían cifrado en el primer trimestre la nueva fecha de resolución del expediente ya que Bruselas activó el reloj del proceso de la fusión la semana pasada con una nueva fecha, el 15 de febrero. Sin embargo, fuentes comunitarias indican que es casi imposible que se dé una respuesta antes de este día. En cualquier caso, estamos hablando de la ralentización del procedimiento burocrático que solo afectaría a los plazos ya que es probable que el acuerdo final tenga muy pocas enmiendas.

El pasado 12 de diciembre Orange y MásMóvil llegaron a un acuerdo con Digi para cederle los activos que la Comisión Europea les obliga a desprenderse para aprobar la fusión. Se puso fin a cuatro meses de negociaciones a varias bandas para cerrar un pacto mediante el cual la operadora de origen rumano se quedará con 60 MHz del espectro móvil de Yoigo y un contrato opcional para alquilar la red de Orange cuando expire su actual contrato con Telefónica a finales de 2026.

Acuerdo con Digi

Este mismo 12 de diciembre Margrethe Vestager volvía a la Comisión Europea después de tres meses de excedencia para hacer campaña por su candidatura a presidir el Banco Europeo de Inversiones (BEI). Vestager finalmente perdió la carrera con la vicepresidenta primera del Gobierno de España, Nadia Calviño, por lo que cumpliendo su compromiso retomó su trabajo en Bruselas a la semana siguiente de cerrar el ‘proceso’ electoral.

Un día después, Orange y MásMóvil enviaron su acuerdo a Bruselas y horas después se volvió a activar el reloj, suspendido desde finales de julio. La coincidencia de fechas no es un tema menor, dicen las fuentes consultadas. Con Vestager de excedencia se logró sacar adelante el acuerdo -aunque más lento de lo esperado- aunque sin la ‘bendición’ explícita de la comisaria de Competencia.

Vestager es la principal ideóloga de la inflexible política de fusiones que ha imperado en la Comisión Europea desde hace casi un lustro. Su máxima es que el sector de las telecos mantiene su competitividad gracias a que tiene tres o cuatro actores fuertes en cada país garantizando unos precios accesibles para los consumidores. En el caso del expediente de Orange y MásMóvil siempre defendió que debían imponerse fuertes remedies ante los riesgos de concentración del mercado residencial en España.

Plazos de Vestager

Estas mismas fuentes agregan que Vestager se tomará su tiempo para conocer todos los detalles del acuerdo y valorar su alcance e impacto en la competencia del mercado español de las telecomunicaciones. La comisaria se ha mostrado sumamente activa tras su vuelta a Bruselas hace solo una semana criticando abiertamente a Amazon y pidiendo una fiscalidad justa para las empresas que operan en la UE, además de mostrarse beligerante contra X por las sospechas de su difusión de contenido ilegal e información errónea.

¿Vestager podría poner en peligro el pacto entre Orange y MásMóvil? Es muy difícil modificar sustancialmente el acuerdo ya alcanzado con Digi, principalmente porque toda la negociación ha sido supervisada por el equipo técnico de la división de competencia de la Comisión Europea. Sin embargo, sí que existe el riesgo de que se pueda extender el proceso mucho más allá de lo esperado, básicamente porque Bruselas tiene sus tiempos y suelen ser sumamente recelosos con sus plazos. Y más con Vestager entre sus filas.

Cada vez que Orange y MásMóvil se han aventurado a dar plazos, desde Bruselas se ha dado un golpe sobre la mesa extendiendo el expediente. En sus últimos resultados trimestrales, la operadora francesa se aventuró a decir que esperaban tener todo resuelto antes de finales de este año, algo que finalmente no se cumplió por los problemas para llegar a un acuerdo con Digi. El nuevo plazo impuesto por la joint venture es el primer trimestre de 2024 y hay quien cree que solo por mantener el control del reloj Bruselas dilatará este plazo.

Parada del reloj

Formalmente, la Comisión Europea ha abierto un proceso de consultas a todos los actores del mercado para recabar información respecto de cómo se evalúa el pacto alcanzado con Digi. Hasta la fecha se ha sabido que Zegona ha pedido clientes de la fusión, aunque en el sector se considera que será imposible que se les conceda y que vuelta atrás el proceso. Oficialmente, Bruselas tiene hasta el 15 de febrero para responder, pero se puede extender diez días más el reloj y se podría parar el reloj cuantas veces quiera la Comisión, lo que aleja un horizonte inmediato de aprobación.

Un plazo que inevitablemente está también condicionado por las fiestas de fin de año, inhábiles en Bruselas. Ya aconteció en la anterior parada del reloj cuando la Comisión Europea activó este mecanismo a finales de julio y no volvió a retomar las negociaciones hasta septiembre. En este caso, no se espera que hasta entrado el mes de enero no se pueda revisar la documentación obtenida de los principales operadores afectados por la integración.

Es así como se superarán largamente los dos años desde que el 8 de marzo de 2022 comenzaran las negociaciones de la joint venture. El acuerdo formal se firmó el 23 de julio, en septiembre se envió la prenotificación, en febrero de 2023 entró la fusión en Bruselas y en abril pasó a fase 2 de investigación exhaustiva. En junio se publicó el pliego de cargos por parte de la UE, en julio paró el reloj para que se llegara a un acuerdo de remedies y ahora en diciembre se ha vuelto activar para tomar una la resolución definitiva.