El Ayuntamiento de Úbeda (Jaén) defiende la transparencia del sorteo y a sus ediles

El Ayuntamiento de Úbeda (Jaén) ha defendido la transparencia del sorteo de un lote navideño valorado en 550 euros y la honorabilidad de los ediles cuestionados, tras las acusaciones de un supuesto amaño.

Los grupos de la oposición en el Ayuntamiento pidieron explicaciones por la polémica suscitada tras la difusión de un vídeo en el que el concejal de Comercio, José Luis Madueño (PSOE), adoptaba una extraña actitud que hacía sospechar sobre un presunto amaño en el sorteo celebrado el pasado 26 de diciembre y que otorgaba un premio de 550 euros en dos carros de productos a retirar del Mercado de Abastos de Úbeda.

En el vídeo aparece Madueño extrayendo la papeleta, de forma poco transparente y con extrañas maniobras en su mano derecha, que han sido lo que ha generado las sospechas, y el resultado fue la extracción de la segunda papeleta con el nombre de una persona familiar directo de Carmen García, concejal de Urbanismo de su mismo grupo político, y que fue también agraciada en el sorteo del año anterior.

La alcaldesa de Úbeda, Antonia Olivares, ha explicado en declaraciones a EFE que Madueño y García presentaron el 8 de enero ante la Policía Nacional «una denuncia abierta» para que se investigue el vídeo y también a quienes hayan realizado comentarios que sean vejatorios y deningrantes hacia los ediles en las redes sociales.

Olivares ha manifestado su tristeza por lo ocurrido y ha lamentado que la primera vez que el presidente del PP provincial, Erik Domínguez, habla de Úbeda haya sido para «difundir una mentira y atentar contra el honor de un concejal y de una buena persona».

Ha dicho que el único objetivo de «este chisme orquestado» es desviar la atención mediática y tapar la marginación que la Junta de Andalucía tiene con Úbeda en muchos temas, especialmente en turismo, porque mientras se hable de esto, esos temas pasan desapercibidos, sobre todo a las puertas de la celebración de FITUR.

La madre de la concejal socialista, ganadora del sorteo, ante la polémica suscitada, ha devuelto el premio y según han dicho a EFE fuentes municipales «tanto la madre como la hija lo están pasando muy mal ya que dicen que no tienen nada que ver con lo ocurrido y que lo único que hicieron fue comprar en el mercado municipal».

El edil que sacó las papeletas de la urna, tras reconocer que están siendo momentos muy duros para él, su familia y compañeros de gobierno, recordando que sufrió un infarto y por prescripción médica se desaconsejaba que tras lo sucedido se incorporara a su cargo, ha defendido que el sorteo se hizo «con total honestidad».

Ha indicado que «sus movimientos espontáneos y habituales» puedan llevar a una interpretación errónea de lo sucedido o generar algún tipo de duda en la ciudadanía, pero que en ningún caso cometió ningún acto fraudulento y que «ha habido personas que han buscado la manera de perjudicar y de intentar ver lo que en realidad nunca pasó».

Esta manera de actuar con «malas artes» sobre todo si están «orquestadas», como ha indicado, no deberían ser utilizadas por nadie, porque pueden hacer un daño irreparable, como ha sido también el caso de la concejala de Urbanismo, Obras y Medio Ambiente, perjudicada indirectamente con esta polémica.