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El último concurso para ir como funcionario a Cataluña deja el 77% de las plazas sin cubrir

El BOE ha publicado el concurso de traslados del SEPE, que deja desiertas 58 plazas del total de 75 para la región

El último concurso para ir como funcionario a Cataluña deja el 77% de las plazas sin cubrir

El Gobierno anunciando una de las últimas ofertas de empleo público. | Europa Press

Grito de alerta del sindicato más representativo en las administraciones públicas. La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado que la Administración General del Estado «se muere» en Cataluña «ante la desidia y la inacción del Gobierno». La central lleva años alertando a los sucesivos gobiernos nacionales que el déficit de funcionarios y peticiones de traslado para irse van en aumento en la región. En especial, en Gerona y Lérida. Esta preocupación se constata en el último gran concurso publicado por el Gobierno, donde han quedado vacantes el 77% de plazas destinadas a Cataluña.

El concurso público de traslados del SEPE, publicado en Boletín Oficial del Estado, del pasado 7 de julio, ha dejado desiertas 58 plazas del total de 75 plazas que se ofertaban para Cataluña. Es decir, un 77% se quedan sin cubrir. Se trata de un concurso para toda España, que desglosado por provincias en Cataluña queda así: en Barcelona, 34 plazas se han quedado desiertas (mientras hay una marcha de 11 funcionarios a otras comunidades autónomas) y cuatro empleados públicos cambian a otra plaza de la misma provincia.

En Gerona, ha habido ocho plazas desiertas (y dos traslados fuera). En Lérida, seis plazas sin cubrir y en Tarragona otras 10. Del total de 75 plazas en Cataluña, 58 se quedan desiertas, se pierden 13 funcionarios que se trasladan a otra comunidad, y cuatro cambian de plaza en la misma provincia.

Los funcionarios de la Generalitat cobran más

«La Administración Estatal en Cataluña no es una opción para ningún empleado público ni opositor de fuera. Y el opositor local no lo ve como una alternativa porque el sueldo que cobra de la Generalitat o de los ayuntamientos es mayor», explica un portavoz del CSIF a instancias de THE OBJECTIVE. Además, se encuentran con la circunstancia de que funcionarios del resto de España que aprueban las plazas de administrativo no se incorporan porque prefieren esperar un año a ver si logran plaza en otra región.

La ley de los Presupuestos Generales del Estado dictamina que la tasa de reposición debe ser del 100% en toda España, pero en Cataluña no se cumple y las peticiones de traslado -que no se experimentan en otras latitudes españolas- acentúan el problema. Otras de las regiones que van por la misma senda catalana son el País Vasco y las Islas Baleares, explican desde el sindicato, aunque no llegan al límite que se vive en Cataluña.

Con todo, el Gobierno intenta cubrir con interinos este déficit de trabajadores. Asimismo, el pasado martes se aprobó en el Consejo de Ministros una oferta ordinaria récord de empleo público de 39.574 plazas, un 15,8% más respecto a las 34.151 de 2022, de las que 27.246 corresponden al turno libre y 12.328 a la promoción interna. Todas las plazas deberán estar convocadas antes del 31 de diciembre de 2023 y la oferta deberá estar ejecutada en dos años.

«Falta de interés del Gobierno»

Desde el CSIF señalan directamente al Gobierno de la situación: «Están dejando morir a la Administración Estatal en Cataluña. La falta de personal, la elevada edad de los empleados y la falta de interés del funcionariado estatal en venir a Cataluña es culpa sólo de la desidia y la falta de interés histórica de la Delegación del Gobierno y del propio Gobierno». Y es que la edad media del empleado público estatal en la región supera los 55 años.

Para revertir esta tendencia, insisten en la «equiparación salarial con los compañeros de la Generalitat». En su ‘Estudio comparativo de retribuciones en las administraciones públicas’, publicado en 2017, especificaban que un funcionario del grupo A1, nivel 28, cobraba 20.841 euros menos anuales respecto al funcionario del mismo grupo y nivel de la Generalitat catalana.

En la misma línea, un funcionario del grupo A2, nivel 26, percibía 12.873,70 euros menos que su homólogo en la administración catalana. Por lo que respecta a los funcionarios del grupo C1 y C2, del nivel 22 y 18, recibían respectivamente 4.335,10 euros y 3.048,08 euros menos que los funcionarios de la Generalitat.

Gerona y Lérida, en la peor situación

Los datos que manejan donde se refleja esta tendencia negativa abarcan desde de enero de 2012 a febrero de 2020. En 2012 en Gerona había 1.524 efectivos, mientras que en 2020 contaban con 1.185. Es decir, un 29% menos en un periodo de siete años. En Lérida, el descenso de trabajadores públicos fue en ese mismo periodo del 18%. De 889 efectivos a 755.

En sentido contrario, en Barcelona y Tarragona subieron (un 8% y 11% respectivamente). Aunque desde el CSIF explican que se cubrieron estas plazas con «personal interino y laborales temporales que en muchas ocasiones solo trabajan ocho o nueve meses». Por esta razón, en la actualidad disponen de otro sistema de cálculo para evitar que se maquillen los malos datos con personal interino.

Los datos de 2023 muestran que en Gerona hay 963 funcionarios y 185 laborales. En Tarragona, 958 funcionarios y 145 laborales. En Barcelona, 7.596 funcionarios y 1.724 laborales. Por último, en Lérida, cuentan con 643 funcionarios y 111 laborales. A diferencia de los funcionarios, los trabajadores laborales se rigen por convenio y por el estatuto de los trabajadores. En todos los casos, se observa un descenso notable en el total de funcionarios respecto al periodo anterior analizado.

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