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Emiko Toguchi, la modelo de 94 años que se ha convertido en una estrella de Instagram

Emiko Toguchi se ha convertido en toda una estrella de Instagram a los 94 años. Con colores llamativos y una gran sonrisa, esta abuela japonesa hace de modelo para su nieta Chinami Mori, con quien aparece en numerosas fotos en la cuenta que comparten en la red social, @1000wave, que en octubre de 2018 cuenta con más de 43.000 seguidores.

Emiko Toguchi, la modelo de 94 años que se ha convertido en una estrella de Instagram

Emiko Toguchi se ha convertido en toda una estrella de Instagram a los 94 años. Con colores llamativos y una gran sonrisa, esta abuela japonesa hace de modelo para su nieta Chinami Mori, con quien aparece en numerosas fotos en la cuenta que comparten en la red social, @1000wave, que en octubre de 2018 cuenta con más de 43.000 seguidores.

Chinami Mori es una artista del tejido saori y diseña chales y bandas para el pelo. Cuando empezó a fotografiar a su abuela con sus creaciones, lo hacía simplemente por diversión, pero la alegría que transmitía la llevó a proponerle que posara para ella en las fotos que publica en Instagram.

Al principio, la imagen de Emiko Toguchi supuso un gran contraste con la que Chinami Mori utilizaba para vender sus productos, pero las primeras publicaciones en las que apareció tuvieron una respuesta muy positiva.

Además, la que pronto se convirtió en su principal modelo, aunque al principio había rechazado la oferta, descubrió que le agradaban los cumplidos de los seguidores, que son numerosos cada vez que aparece en una nueva publicación. Al principio, Emiko Toguchi pensaba que ser modelo era para gente joven, como ha reconocido en varias ocasiones, pero se convenció a sí misma de que podía hacerlo y ahora disfruta posando para su nieta y leyendo los comentarios positivos que recibe.

Emiko Toguchi abandonó Ie-jima, en la prefectura de Hyogo, cuando todavía estaba en la escuela, y sufrió un grave ataque aéreo en Yokohama durante la Segunda Guerra Mundial. Al final de ésta, regresó a Okinawa. Poco después, su marido falleció repentinamente a los 35 años y ella tuvo que criar sola a sus cinco hijas y volver a Hyogo, donde vive una de sus hijas en la actualidad.

Ahora, la cuenta de Instagram de su nieta, las fotografías en las que posa para ella y los momentos que dedican a preparar las publicaciones son un motivo para sonreír y olvidar durante un rato los duros momentos de su pasado.

 

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なつみさんとおばあちゃん✧

Una publicación compartida de chinami (@1000wave) el

Por su parte, su nieta quiere conseguir que se sienta “rejuvenecida, aunque solo sea en su corazón”. “Me digo a mí misma que si yo estoy pasándolo bien, ella también”, ha dicho en varias entrevistas.

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