Todo sobre los herederos de Silvio Berlusconi: quiénes son y el patrimonio a repartir

Italia continúa agitada tras la sorprendente muerte de Silvio Berlusconi. El carismático mandatario italiano perdió la vida este pasado lunes y será este mismo miércoles, 14 de junio, cuando se celebre su funeral con honores, en la catedral del Duomo de Milán. Más allá de los actos oficiales, hay otro asunto del que se habla con fuerza: la herencia.

¿A quién van a ir a parar los miles de millones de fortuna que Berlusconi amasó en vida? La respuesta parece sencilla ya que sus descendientes son los herederos legítimos. Sin embargo, no todo es tan sencillo como parece. Il Cavaliere fue padre de cinco hijos de dos mujeres diferentes.

Los mayores son Marina, de 57 años, de quien dicen es la mujer con mayor fortuna de Italia, y Piersilvio, de 54, consejero delegado del grupo audiovisual Mediaset. Ambos nacieron de su relación con Carla Elvira Dall’Oglio. Después llegarían Bárbara (1986) Eleonora (1986) y Luigi (1988) fruto de su romance con la actriz Verónica Lario.

El conglomerado financiero

Todos los vástagos del mandamás milanés ocupan importantes cargos en las empresas familiares. El buque insignia es MFE (antigua Mediaset Italia), de la que se derivan otras compañías. Esta está controlada por Fininvest con un 48,2%, con la francesa Vivendi como segundo accionista con un 23,35%. Fininvest, a su vez, está totalmente gestionada por la familia Berlusconi, pero con una estructura de propiedad compleja: la comparten siete holdings.

Hasta su muerte, el ex primer ministro controlaba el 61% del holding que opera en el sector de la televisión con Mediaset y en el editorial con Mondadori. Un porcentaje mayoritario que en realidad le aseguraba tener el dominio y casi todo el peso en las decisiones.

El rol de los hijos de Berlusconi

Es aquí donde adquieren un papel protagonista los hijos de Berlusconi. El resto de las acciones del conglomerado familiar se reparten entre los hijos: Marina tiene el 8% de las acciones, es presidenta del holding y encabeza Mondadori mientras que Pier Silvio tiene el 8% y es el hombre que dirige Mediaset.

Por su parte, los tres hijos Barbara, Eleonora y Luigi juntos poseen el 21% de la empresa. Luigi y Barbara no tienen funciones operativas, pero son accionistas de Fininvest y forman parte de la junta directiva.

El nexo que une a los descendientes del polémico personaje público es que han decidido vivir alejados del impacto mediático que siempre ha desatado su progenitor. El mayor, Silvio, permanecía en silencio salvo que se tratara para defender a su padre de causas judiciales o ataques de la oposición.

Marina Berlusconi es una de las más poderosas. Forbes la incluyó en la lista de las 100 mujeres de negocios más poderosas. Formó una familia con Maurizio Vanadia, que fue primer bailarín del Teatro alla Scala, de dos hijos.

Piel Silvio se graduó en marketing y sus primeros pasos fue creando programas de televisión para los jóvenes. Tiene un noviazgo duradero -10 años- con la presentadora Silvia Toffanin, con la que tiene dos hijos, además de otra, fruto de una relación previa. La polémica también la ha heredado de Berlusconi pues ha estado implicado en los casos de fraude y evasión fiscal de su padre.

Sus otros descendientes

Por otro lado quedan sus hijos con Verónica Lario. Bárbara fue directiva del AC Milan, equipo que compró Berlusconi a finales de los 80, y ha estado ligada a las inversiones en fútbol de este. A nivel sentimental está separada y tiene cuatro hijos. Por último, Eleonora se especializó Administración de Empresas en Nueva York y es la encargada de las iniciativas solidarias.

Hay varias preguntas en el aire. ¿A quién irá realmente la herencia de Berlusconi? ¿Cómo se dividirán las acciones de la empresa y la vivienda? En Italia se habla de que Pier Silvio podría hacerse con el timón de Mediaset, mientras que Fininvest y Mondadori podrían ir a su hija Marina, aunque no hay que olvidar a los otros tres hijos.

Especial interés recae sobre la figura de la última novia de Il Cavaliere, Marta Fascina, con quien se casó de manera ilegal. En un principio no le correspondería herencia alguna de manera universal, pero está por ver qué papel adopta tras dar el último adiós a su gran amor.