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El dueño de la finca de Totalán asegura que tapó con ladrillos el pozo al que cayó Julen

El dueño de la finca de Totalán, en Málaga, en la que se encuentra el pozo al que cayó Julen, que fue encontrado sin vida 13 días después de la caída, ha asegurado en su declaración ante la Guardia Civil que puso dos ladrillos de hormigón encima del orificio. Además, ha insistido en que el encargado de construir el pozo nunca selló la prospección.

El dueño de la finca de Totalán asegura que tapó con ladrillos el pozo al que cayó Julen

Reuters

El dueño de la finca de Totalán, en Málaga, en la que se encuentra el pozo al que cayó Julen, que fue encontrado sin vida 13 días después, ha asegurado en su declaración ante la Guardia Civil que puso dos ladrillos de hormigón encima del orificio. Además, ha insistido en que el encargado de construir el pozo nunca selló la prospección.

El dueño de la finca, de 4.439 metros cuadrados y que adquirió en octubre de 2018, ha explicado que el pocero nunca selló la perforación, que realizó los días 17 y 18 de diciembre sin ningún contrato escrito, tan solo con un acuerdo verbal.

Respecto a la licencia para realizarlo, ha declarado que desconocía la documentación que requería para ello, publica este miércoles Diario Sur.

Los agentes han tomado declaración a todas las personas que se encontraban en la parcela cuando Julen cayó al pozo: los padres del niño; la prima del padre y su novio, que es el propietario de la finca; al pocero y al operario que hizo un movimiento de tierras con una máquina.

En estas declaraciones ante la Guardia Civil, el padre de Julen, José Roselló, ha dicho que estaba echando ramas al fuego cuando observó cómo su hijo corría por la zanja hacia la esquina donde se encontraba el pozo, a unos 10 ó 15 metros de él, por lo que corrió tras él para cogerlo pero no pudo evitar la caída.

Además, ha afirmado que junto al agujero había dos bloques de hormigón separados, y que el dueño de la finca les advirtió del pozo pero aseguró que estaba tapado.

Por otra parte, la madre ha declarado que no observó la escena porque estaba llamando a su trabajo cuando oyó los gritos.

El encargado de construir el pozo afirma, por su parte, que el dueño de la finca le dijo que tenía todos los permisos. Además, ha explicado que usó una máquina de rotopercusión con la que hizo una perforación a 150 metros en la que no hallaron agua y otra a 110 metros, por la que cayó Julen, con el mismo resultado.

Ha asegurado también que dejó toda la tierra que extrajo alrededor del pozo y que tapó el agujero con una piedra de 15 kilos, así como ha insistido en que la zanja no estaba cuando él hizo la perforación, según informa el mismo diario.

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