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El candidato de Junts en Barcelona 'pasa' de Puigdemont y se abre a pactos con el PSC

Xavier Trias baraja renunciar a las siglas del partido en las elecciones municipales de mayo

El candidato de Junts en Barcelona ‘pasa’ de Puigdemont y se abre a pactos con el PSC

El candidato a la alcaldía de Barcelona, Xavier Trias. | Europa Press

El candidato de Junts en el Ayuntamiento de Barcelona, Xavier Trias, reniega de la línea mantenida desde Waterloo por Carles Puigdemont. El también exalcalde de la Ciudad Condal ha comunicado la voluntad de que su candidatura consiga apoyos más allá de los simpatizantes de la formación y para ello se abre a pactos con el PSC, como el que ya existe en la Diputación de Barcelona entre los posconvergentes y los de Salvador Illa.

Trias forma parte de las corrientes más pragmáticas del partido y, a diferencia de otros altos cargos o cuadros intermedios, no renuncia de su pasado en Convergència. Aunque ha tenido que exhibir pedigrí independentista, no dudó en oponerse a la salida de Junts del Govern con ERC y tampoco esconde que lograr un concierto económico para Cataluña -parecido al del País Vasco- sería una buena opción para desistir en la implantación de una eventual república catalana.

Si bien es cierto que el partido ya había asumido que para Barcelona iba a recurrir a un perfil de gestor -incluso se habló de «un tecnócrata a la italiana» en detrimento de nombres como el de Jaime Alonso Cuevillas, que pujaban para ser candidato-, la opción de Trias es una enmienda a la totalidad a la estrategia de Puigdemont y se acerca más a la vía que abandera ERC.

Barcelona
Xavier Trias en Barcelona, con Neus Munté o Ferran Mascarell, entre otros

Sin las siglas de partido

Como reconoció en una entrevista en Ser Catalunya, Trias buscará impulsar una suerte de plataforma ciudadana y está dispuesto a esconder las siglas del partido. Es decir, que aparezcan relegadas a su nombre y al del resto de candidatos de la sociedad civil a quien espera fichar.

«En algún sitio pondrá Junts per Catalunya, pero no será único. Yo intento que haya más gente que Junts. Podría ser Trias por Barcelona. No solo podría ser, sino que yo creo que será», insistió.

Además de su disposición a alcanzar pactos con el PSC, el alcaldable de Junts tampoco ve con malos ojos pactar con la ERC de Ernest Maragall, que junto a los socialistas parten con mayor ventaja en todos los sondeos para arrebatarle la alcaldía a Ada Colau.

Confrontar el «hippismo» de Colau

De alguna manera, el único extremo que comparte con las tesis dominantes en su partido es su oposición a la actual alcaldesa de Barcelona. Como informó este periódico, la dirección de Junts cree que para tener posibilidades en la capital catalana hay que confrontar «el hippismo» de Colau.

En una reunión de la cúpula en junio se habló de encontrar una persona a la que poder presentar como candidato serio y capaz de arreglar los asuntos que hoy en día más preocupan a los ciudadanos de Barcelona, descontentos con la gestión y el «hippismo» de Ada Colau al frente del Ayuntamiento, según las fuentes consultadas. En particular, ante el hartazgo por la inseguridad, el tráfico y las obras.

Junts no levanta cabeza en Barcelona

La marcha de Elsa Artadi, exlíder de Junts en el consistorio, por motivos personales desembocó en una pugna de posibles candidatos. En especial, por la necesidad que tiene el espacio nacionalista de que la capital catalana sea la punta de lanza de su proyecto rupturista tras dos mandatos de Colau.

Pero Trias ya exigió que los perfiles más radicales o cercanos a Laura Borràs, como el propio Cuevillas, no formaran parte de su proyecto. Sino todo lo contrario. El alcaldable de Junts confía en perfiles de la vieja guardia convergente, como Neus Munté y Jordi Martí, que serán su número dos y número tres en la candidatura. También Victòria Alsina, la exconsejera de Acción Exterior que también se mostró partidaria de mantener los puentes con ERC, ha estrechado vínculos con Trias.

El objetivo primordial es poder tener la llave de la gobernabilidad en Barcelona. Como partido bisagra capaz de pactar con ERC o PSC. Y para ello necesitará revertir los malos resultados de su predecesora. Si en 2015, la extinta CiU, con Trias al frente, obtuvo 10 escaños, en las últimas elecciones de 2019, Artadi se quedó en la mitad (cinco escaños).

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