Atrapan a un conductor en Barcelona que se saltaba peajes pegándose al coche de delante

Los Mossos d’Esquadra, en colaboración con la empresa que gestiona los túneles de Vallvidrera (Barcelona), han atrapado a un individuo que durante tres meses había evitado pagar los peajes para entrar a la Ciudad Condal. Su técnica consistía en pegarse al vehículo de delante, y acceder cuando al mismo se le levantase la barrera; según ha informado El Caso.

Este sujeto trabaja en Barcelona capital y, para desplazarse hasta allí, utiliza su vehículo y accede a la ciudad a través del túnel de Vallvidrera. Si bien esta ruta exige un paso por un peaje, a este usuario se le ocurrió la idea de ahorrárselo a través de una peligrosa maniobra de conducción: pegarse al vehículo de delante lo máximo posible, con el fin de acceder sin pagar mientras al mismo se le levantaba la barrera.

Tan solo durante el mes de junio, se le ha detectado circulando con su coche y realizando esta misma maniobra una decena de veces. Las pruebas evidencian que es la ruta utilizada para acudir al trabajo: únicamente pasaba en días laborables, en un horario de entre las seis y las siete de la mañana, y siempre en sentido Barcelona capital.

Con la visualización de las imágenes de seguridad, los Mossos d’Esquadra trazaron un plan para poder interceptarlo in fraganti. Y así fue: se montó un dispositivo a lo largo de la ruta trazada por el individuo, y alrededor de las siete de la mañana, las alarmas saltaron cuando evitó el pago del peaje.

Una vez accedió al túnel, su ‘económica’ ruta habitual por peaje llegaría a su fin. Y es que, a la salida del pasadizo, fue interceptado e identificado como el autor de numerosas infracciones al volante. Así, fue multado por tres razones: no pagar el peaje, no mantener la distancia de seguridad y conducción temeraria.

Peligrosas maniobras en el túnel

La historia de este conductor no termina aquí, ya que no solo puso en peligro la seguridad vial con su extrema cercanía a los vehículos inmediatos para no pagar el peaje. Diferentes reportes de usuarios de la vía alertaron sobre este mismo sujeto, quien en el interior del túnel realizaba peligrosos adelantamientos, haciendo uso de un carril que siempre se encontraba cerrado.

De esta forma, además de exceder los límites de velocidad, ponía en peligro su vida y la del resto de conductores, que, estupefactos, llamaron a las autoridades denunciando estos hechos. El carril que utilizaba era el carril central, exclusivamente abierto en momentos de tráfico excepcionales.