THE OBJECTIVE
Sociedad

El número de embriones criopreservados en España crece un 310% en nueve años

Datos la Sociedad Española de Fertilidad revelan que hay 60.000 de ellos abandonados por sus progenitores

El número de embriones criopreservados en España crece un 310% en nueve años

Embriones congelados. | Instituto Bernabéu

La maternidad en España se ha ido retrasando en los últimos años hasta situar la media de edad del primer hijo por encima de los 32 años. Las razones –de corte económico unido a la complejidad que supone la conciliación– ha provocado que cada vez más mujeres recurran a técnicas de fecundación asistida para poder cumplir su deseo de ser madres. Sin embargo, este tipo de terapias ha provocado un aumento en el número de embriones criopreservados o congelados en los últimos años en España hasta situarlos en los 777.679 en 2021: un 310% más que hace ocho años.

Los datos provienen de un estudio del Instituto BernabéuInstituto Bernabéu, red de centros especializados en este tipo de técnicas, que en una consulta de THE OBJECTIVE explica que el número de embriones que se congelan para poder ser utilizados por las madres en un futuro ha aumentado en los últimos años, experimentando un crecimiento hasta pasar de los 250.144 embriones en 2013 hasta los 777.679 de 2021. De un año para otro (entre 2020 y 2021), el crecimiento fue del 20%.

Las razones de este crecimiento son variadas y responden a la normalización y popularización de este tipo de técnicas entre la sociedad española. Este diario ya ha explicado en anteriores ocasiones que el negocio de estas clínicas no ha dejado de crecer en los últimos años hasta el establecimiento de más 439 centros que practican este tipo de terapias de fertilidad para ayudar a los padres. En el plano económico, su cifra de negocio no es desdeñable, ya que en 2021 fue de 660 millones, según los datos aportados por el Observatorio Sectorial DBK. Este mismo estudio especificaba que la mayoría de los centros eran privados.

En 2021, última fecha de la que se tiene registros, nacieron 40.638 niños gracias a este tipo de técnicas, lo que supone un incremento del 33,3% con respecto al curso pasado. Los métodos seguidos para conseguirlo fueron variados. La Sociedad Española de Fertilidad (SEF) y el Ministerio de Sanidad informan de que se llevaron a cabo 165.453 ciclos de Fecundaciones In Vitro (FIV) y 33.818 Inseminaciones Artificiales (IA), lo que para los primeros supone un incremento del 11,7% con respecto a los datos del 2019 y un 29,8% con respecto al año previo (que se habían reducido a 127.420 debido a la pandemia). 

60.005 embriones abandonados

Los datos de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF) sobre el número de embriones preservados en sistemas de congelación explican que cada vez retrasamos más la edad de maternidad y paternidad en España. Este aumento de la demanda ha tenido un efecto colateral: cada vez se abandonan más embriones al no tener un destino claro o no ser reclamados por parte de los progenitores. Esta situación genera una serie de problemas logísticos a las clínicas de medicina reproductiva. La preservación de estos embriones, según indican los especialistas del Instituto Bernabeu, tiene un coste importante ya que el mantenimiento de las instalaciones no es barato, al igual que el consumo de nitrógeno.

En los bancos de España se guardan, según los registros, los 668.082 embriones mencionados, de los que se estima que 60.005 se hallan en una situación de abandono. Esto equivale aproximadamente al 10% de los embriones criopreservados, generando un dilema ético y legal para los profesionales en medicina reproductiva, quienes se enfrentan a la dificultad de asignarles un destino definido. En España, y dentro de las opciones que permite la ley, aproximadamente el 45% de los embriones congelados son destinados al uso por los propios pacientes, mientras que el 5% son donados a otras parejas con fines reproductivos, el 18% se destina a fines de investigación y el 18% restante tiene como destino la destrucción. Sin embargo, existe algo más del 10% para los que no existe un destino definido.

La Ley sobre Técnicas de Reproducción Humana Asistida indica que las clínicas tienen la obligación de solicitar periódicamente a la mujer o pareja progenitora la renovación o modificación del consentimiento donde consta el destino elegido para sus embriones. Si tras dos intentos los pacientes no cumplen con este requisito los embriones quedarían a disposición del centro y podrían destinarlos conforme a su criterio a cualquiera de los fines citados.

«Tenemos que distinguir entre lo que denominamos embriones abandonados de lo que los especialistas clasificamos como embriones a los que no podemos dar el destino elegido por sus progenitores. Las causas por las que un embrión puede acabar abandonado son diversas. Lo más habitual es que sea porque sus dueños se desentiendan de ellos o que la pareja sea imposible de localizar», explica el director del Programa de Donación de ovocitos y criobiología de Instituto Bernabéu, Jaime Guerrero.

Sin embargo, aunque la ley contempla que el destino de los embriones abandonados pasaría a ser competencia de las clínicas, lo cierto es que esto tiene sus limitaciones. Muchos de estos embriones no reúnen los requisitos mínimos para ser donados a otras parejas, tampoco se pueden dirigir a proyectos de investigación porque son inexistentes, y tampoco se opta por destruirlos ante la posibilidad de que fueran reclamados en un futuro por sus progenitores. Paradójicamente, aunque los progenitores sí hayan decidido el destino de estos embriones, esta situación puede darse también al no poder llevar a cabo su voluntad, ya que pueden no cumplir los requisitos que marca la normativa legal.

«Además, la legislación no es tajante y no deja claro qué pasaría si los progenitores aparecieran después de haberse desentendido durante años y los reclamaran. Esta incertidumbre provoca que la mayoría de centros optemos por conservarlos indefinidamente hasta que la ley aclare esta situación. Es decir, estos embriones quedan en el limbo, sin que puedan destinarse en muchas ocasiones para otras parejas o para la investigación científica», explica Guerrero.

Europa es consciente de esta realidad y muchos nacimientos que se han llevado a cabo a través de estas técnicas se han dado en España. En 2021, representaron el 11%, aunque el país puede considerarse como una de las mecas de la reproducción asistida gracias a los precios competitivos, la especialización de los profesionales y los buenos resultados que ha dado este modelo.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D