Telefónica eleva un 1,8% sus ingresos, pero su beneficio cae un 75% por las plusvalías de 2021

Telefónica ganó 2.011 millones de euros en 2022, según los resultados reportados por la compañía este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El dato supone una reducción del 75,3% respecto de las cifras registradas en 2021 por las plusvalías registradas en el ejercicio anterior -como el cierre de la creación de FiBrasil y las ventas de las torres de Telefónica Deutschland a American Tower o de Telefónica Costa Rica a Liberty Latin América- que llevaron los beneficios hasta el récord histórico de 8.137 millones.

Es así como el Oibda (equivalente al Ebitda o resultado operativo antes de amortizaciones) se situó en 12.852 millones de euros, con el mismo impacto de las plusvalías y una caída del 41,5%. La compañía volvió a crecer en ingresos reportados (que incluyen el impacto del tipo de cambio en Latinoamérica) por primera vez desde 2015. De esta manera, en 2022 se registraron 39.993 millones de facturación, un 1,8% de crecimiento. Telefónica explica estos resultados «gracias al crecimiento de los ingresos en todos los mercados en los que opera y a la eficiencia en la gestión y el control de los costes».

En un año marcado por la guerra de Ucrania que ha generado un inestable contexto macroeconómico y donde se han disparado los tipos de interés, la compañía cerró contratos de energía a largo plazo, renegoció acuerdos con proveedores, firmó nuevos pactos de subidas salariales en sus principales mercados, subió precios ajustados a la inflación (incluido España) y ajustó sus costes e ingresos a la nueva realidad macroeconómica. Una serie de movimientos que le permitieron mitigar unos costes internacionales disparados.

Deuda y flujo de caja

De esta manera, cerró el año con un flujo de caja libre de 4.566 millones de euros, una liquidez de 21.413 millones, un 72,5% superior al del año anterior y ya tiene más del 80% de la deuda a tipo fijo, los vencimientos de los tres próximos años cubiertos y y una vida media de la deuda de 13,1 años. La deuda financiera neta, excluyendo arrendamientos, llegó a los 26.687 millones de euros, un 2,3% de crecimiento interanual. Con arrendamientos incluidos, se eleva hasta los 35.332 millones frente a los 34.112 millones de un año antes.

Telefónica además ha anunciado un dividendo para 2023 de 0,30 euros en efectivo, igual que en 2022, que se abonará en dos pagos de 0,15 euros cada uno. El primero se pagará en diciembre de este año y el segundo en junio de 2024. Por otro lado, la operadora ha anunciado que propondrá a los accionistas la amortización del 0,4% del capital social existente en autocartera a 30 de junio de 2022. Este es el segundo año en el que vuelve el dividendo en efectivo tras algunos cursos con pago en acciones.

La compañía ha anunciado además su hoja de ruta para 2023 con unos objetivos (guidance) de crecimiento orgánico de un dígito bajo tanto en ventas como en Oibda, y una ratio de inversión sobre ventas en el entorno del 14%. En 2022, los objetivos financieros se superaron al registrar un incremento orgánico de los ingresos del 4% y del resultado operativo antes de amortizaciones del 3%. La ratio de inversiones sobre ventas se situó en el 14,8%.

Telefónica España

“Estamos muy satisfechos con la transformación que está llevando a cabo la compañía y estamos bien posicionados para continuar con esta senda de crecimiento rentable. En 2022 Telefónica ha vuelto a demostrar su solidez, el compromiso con sus objetivos y su capacidad para sortear los entornos más complejos. En 2023 seguiremos manteniendo la disciplina financiera actual y continuaremos priorizando las inversiones en proyectos de conectividad. Para Telefónica, dar respuesta a las nuevas demandas de la era digital no es una opción; es la opción”, ha indicado José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica.

Por mercados, los ingresos de Telefónica España crecieron un 0,6% (en los 12.497 millones) y aumentaron entre octubre y diciembre por séptimo trimestre consecutivo, frente a un sector que sigue perdiendo en facturación. La operadora, con un Oibda de 4.588 millones, mantiene el pulso porque han vuelto a crecer sus ingresos por servicio, en el último trimestre del año pasado, con alza interanual por primera vez en tres años. El ingreso medio por cliente (ARPU) permanece por encima de los 90 euros. España representa un 30% de los ingresos globales de la operadora.

Telefónica Alemania registró un beneficio neto de 232 millones de euros, un 9,9% superior a los 211 millones de euros registrados en el ejercicio anterior. La filial germana de Telefónica facturó 8.224 millones de euros en el año, un aumento del 5,9%, impulsado por el buen comportamiento del negocio móvil y un año récord en la venta de dispositivos electrónicos. Por su parte, Telefónica Brasil ganó 726 millones de euros, un 35% menos por el impacto de un cré­dito fiscal de 250 mi­llones de eu­ros. Sus ingresos crecieron a doble dígito.

Fibra óptica y 5G

Por unidad de negocio, Telefónica Tech creció un 57,1% respecto a 2021, hasta los 1.482 millones de euros, mientras que Telefónica Infra cerró con una cobertura de más de 13 millones de unidades inmobiliarias (UUII) pasadas por fibra. Por su parte, Telxius, el negocio de cable submarino de la compañía ha registrado un crecimiento orgánico del Oibda del 17,2%, hasta los 218 millones de euros, con un margen del 51,8%. 

En términos de clientes, Telefónica cerró el ejercicio 2022 con un total de 383,1 millones de accesos, un 4% más que a diciembre de 2021. Y en cuanto a infraestructuras cerró con un total de 168,1 millones de unidades inmobiliarias pasadas con fibra óptica a diciembre de 2022, un 5% más que en el mismo periodo del año anterior, de las cuales un total de 64,5 millones (+16%) pasan por red propia de la compañía. 

En cuanto a la tecnología 5G, Telefónica cuenta ya con una cobertura de más de 1.600 localidades en Reino Unido, más del 80% de la población en Alemania, más del 85% en España y un total de 39 ciudades en Brasil. La operadora desarrolla en estos momentos su red 5G stand alone, que debería desbloquear todo el verdadero potencial de la nueva tecnología de redes inalámbricas ultrarrápidas, en especial en entornos industriales.