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Acusada una mujer en Palma por el ataque de su perro a su propio nieto

Según declaró un veterinario de Mallorca, el can habría atacado a otro menor de edad antes de que fuese adoptado

Acusada una mujer en Palma por el ataque de su perro a su propio nieto

Imagen de un cachorro de perro mezcla entre las razas labrador y husky, como el que atacó al niño. | Wamiz

Una mujer de 62 años de edad ha sido acusada en Palma (Mallorca) después de que su perro atacase a su propio nieto, ocasionándole graves heridas en el cuello, en la cabeza y en la región lumbar. Finalmente ha sido absuelta en un juzgado de lo Penal en Palma, tal y como ha informado Ultima Hora.

Los hechos se remontan al verano del 2018, cuando un 27 de junio la acusada acudió junto a su nieto al taller artesanal en el que trabajaba. El can, que se encontraba fuera del local atado con una cuerda, era un perro mezcla entre las razas labrador y husky.

En el taller también estaba un socio de la mujer, quien trabajaba con ella. Así, la misma se tuvo que ausentar durante un tiempo, alertando al varón de que su nieto, menor de edad, se hallaba en el interior del despacho del local, mientras se entretenía con el ordenador del trabajo de su abuela.

Sin que se diera cuenta el socio de la mujer, el menor salió del despacho y del local, y entonces se produjo el brutal ataque por parte del animal. Así, con severos mordiscos, el perro le ocasionó dolorosas heridas en la región lumbar, en el cuello y en la cabeza, por las cuales el niño tiene que seguir yendo a tratarse al traumatólogo hoy en día; casi cinco años después.

En posteriores declaraciones, la abuela del niño admitió haber adoptado al can teniendo conocimiento de que no mostraba actitud agresiva alguna, pero con el objetivo de proteger el taller artesanal en caso de un posible robo. Esto vino promovido por una denuncia previa, interpuesta por la exnuera de la acusada.

Además, alegó haber adoptado al perro con recomendación previa de la Policía. Sin embargo, su teoría fue desmontada por un veterinario de Mallorca, quien había revisado al perro antes de su puesta en adopción y declaró ante las autoridades que el animal había agredido previamente a otro menor de edad.

Con estos datos recogidos, la Fiscalía pidió desde un inicio una multa de 1.200 euros por un delito de lesiones imprudentes. Sin embargo, la magistrada encargada del juicio celebrado contra la acusada, ha absuelto a la misma, alegando que «el perro no estaba catalogado como una especie potencialmente peligrosa».

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