Los 27 aprueban quitar poder a agencias como la Airef en el control de las cuentas públicas

Este miércoles, bajo la presidencia española del Consejo Europeo, los ministros de Finanzas de los 27 Estados miembros lograban cerrar en el Ecofin un acuerdo para recuperar en los próximos ejercicios presupuestarios las reglas fiscales que se quedaron atrás con motivo de la pandemia y la posterior crisis suscitada por la invasión rusa de Ucrania.

Con España como país anfitrión, y con la vicepresidenta primera en su nombre, Nadia Calviño, el Consejo de Asuntos Económicos y Financieros ha puesto fin así a una larga negociación que, a la postre, y según fuentes comunitarias explican a THE OBJECTIVE, ha descafeinado la inicial intención de la Comisión y de la Eurocámara de que las autoridades fiscales independientes -como es el caso de la Airef, en España- ejercieran un papel más relevante.

Una función de mayor calado que ha caído bajo la presidencia española del Gobierno de Pedro Sánchez, y que entre otras actuaciones alentadas por la Comisión, proponía que las instituciones financieras internacionales (IFI) ejercieran durante el semestre europeo una coordinación fiscal entre los Estados miembros, algo que hoy no sucede.

Se trata de una dirección -comentan fuentes consultadas- reflejada en los primeros borradores de las reglas fiscales, con el apoyo fundamental de los técnicos, lo que, en efecto, postulaba un papel específico para las IFI, que ahora el Consejo Europeo diluye.

Función de evaluación

Hasta ahora, en el caso de España, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal, Airef, avala el cuadro macroeconómico que acompaña a los Presupuestos y también al Plan de Estabilidad. Además, emite recomendaciones -como hará a lo largo de esta semana, respecto a las del III trimestre, tal y como recoge su agenda- y, sin ser vinculante, recibe explicaciones de las autoridades si esas recomendaciones no se llevaran a cabo.

Con un escenario prácticamente parecido, el Ecofin habría decidido no tocar casi ni una coma y no introducir cambios, de manera que la función de las instituciones fiscales independientes estará a expensas de lo que los Estados miembros les soliciten -como recoge el artículo 22-, relativo a los marcos presupuestarios, facilitando así una evaluación de la conformidad con la senda de gasto neto de los datos sobre los resultados presupuestarios comunicados en el informe de situación.

Asimismo, cuando proceda, los Estados miembros podrán solicitar a la institución fiscal nacional independiente pertinente que analice también los factores subyacentes a una desviación de la senda de gasto neto. Ahora bien, estos análisis no serán en cualquier caso vinculantes, y al mismo tiempo, serán adicionales a los proporcionados por la Comisión.

Como garante de la sostenibilidad de las cuentas públicas, y en su tarea de supervisión fiscal y de evaluación mediante informes, opiniones y estudios, la relevancia del papel de las instituciones fiscales ha sido algo que siempre ha defendido la Airef, animando que se incluya, dentro de la Ley Orgánica que regula la institución, la función de evaluación, puesto que ya existe la división de la misma.

Cabe señalar que otras autoridades del mismo rango, como la holandesa, tienen la potestad de valorar los programas electorales, especialmente cuando hay gobiernos de coalición. Se trata de algo muy frecuente en los Países Bajos, donde estudian y valoran el impacto del programa económico alcanzado, una circunstancia que no se contempla en España.

Sin reglas hasta 2025

Sin grandes avances en el peso de las autoridades fiscales por parte del Consejo, lo cierto es que la aprobación de las reglas fiscales aún tiene un camino por recorrer. De momento, este jueves conoceremos los detalles del acuerdo -donde Francia y Alemania han ejercido el liderazgo-, una vez aprobados por el Comité de Representantes de la Unión Europea.

Será en enero, por tanto, cuando llegue al Parlamento. Posiblemente, entre febrero y marzo comience la negociación con el Consejo y con los trílogos de la UE, donde se agilizan los procedimientos de tramitación europea.

No obstante, según explican a este diario, los Estados miembros tienen margen para presentar sus planes presupuestarios del próximo año, algo que no sucederá hasta la primavera. Por lo tanto, la aplicación de las reglas no llegará antes de 2025, según coligen las mismas fuentes.

Presión desde el Parlamento europeo

Ante esta situación, Eva Poptcheva, eurodiputada de Ciudadanos y vicepresidenta de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios, explica a TO que, con la reforma de las reglas fiscales, «los gobiernos tendrán más margen de maniobra a la hora de elaborar sus planes. Pero esto no puede ser un cheque en blanco -recalca-. Se requieren contrapesos».

De ahí -añade- que «en la posición del Parlamento Europeo, hemos reforzado el papel de las entidades fiscales independientes, como la AIReF en España. Por eso es lamentable -insiste- que la presidencia española del Consejo pretenda diluir el papel de estas entidades en la revisión de las reglas fiscales».

En cualquier caso, determina Poptcheva, «no nos sorprende. La AIReF ha sido clave a la hora de aportar datos fiables sobre crecimiento económico, desarrollo demográfico y evolución de la deuda y el déficit que, en muchas ocasiones, contradecían a las cifras utilizadas por el Gobierno». Pero este es precisamente el rol de las entidades fiscales independientes -resuelve-, «aportar datos fiables que permitan la rendición de cuentas y que incentiven la responsabilidad de los gobiernos. Por eso -concluye-, desde el Parlamento Europeo, presionaremos para reforzar su papel en las negociaciones con los gobiernos de los Estados miembros».