Juan Claudio de Ramón

Vidas cruzadas con Juan Claudio de Ramón

Vidas cruzadas con Juan Claudio de Ramón

Juan Claudio de Ramón (Madrid, 1982) es diplomático y ensayista. Ha estado destinado en las embajadas de Ottawa y Roma, y actualmente reside en Madrid. Complementa su labor como diplomático con el columnismo de actualidad y la reflexión filosófica, con especial atención a la historia de las ideas y de las naciones.

Fiarse

Fiarse

«Si el confinamiento fue un experimento natural, llevamos ya unos meses metidos en otro: el del uso responsable de la libertad recobrada al abrirse las puertas de la celda»

Insulina para agitados

Insulina para agitados

«Si a alguno le empiezan a fallar las reservas de autocontrol en la Tebaida de su confinamiento, y comienza a sentir una insuprimible exigencia de salir de su cuarto, que no lo dude y se administre esta insulina para agitados»

Consecuencias de Zapatero

Consecuencias de Zapatero

Para quienes nos dedicamos a estudiar lo que creemos el mayor factor de corrosión de la vida democrática en España –la alianza entre la izquierda española y los nacionalismos segregadores– la entrevista que el ex presidente Rodríguez Zapatero dio hace poco al diario El Español tiene un extraordinario interés. Casi podríamos decir, como un jurista, que se trata de un documento con valor de cosa juzgada. Me refiero, en concreto, al momento en que un atinado Daniel Basteiro le extrae las siguientes afirmaciones: 

Decir tonterías

Decir tonterías

«Dos ejemplos recientes de genialidad corrosiva: Peter Handke, al que reprochamos sus caprichosas loas a un genocida, y Cristina Morales, que dice preferir ver arder todo en una gran pira a que las tiendas abran»

Dos en la carretera

Dos en la carretera

En el norte de Tanzania, en la llanura del Serengueti, hay un lugar llamado Garganta de Onduvai que es un exuberante festín para los cazadores de fósiles. Siete capas de sedimentos lo convierten en el yacimiento prehistórico más importante del mundo, y en el escenario probable de la primera página de nuestra historia, cuando aprendimos a ser humanos.

Amigos catalanes

Amigos catalanes

De la ciudad –que es la comunidad política– Aristóteles dijo dos cosas: que está hecha de diferencias, y que la amistad la mantiene unida. Mis amigos catalanes me lo recuerdan todos los días. No estoy seguro de que sepan lo mucho que les admiro. 

Perder la esperanza

Perder la esperanza

Si hay algo horrible en este mundo, si hay algo que derrota cualquier ilusión de sentido, es el sufrimiento de un niño. El tormento ante la contemplación de un cuerpo infantil que sufre es tan doloroso, tan insoportable la conciencia del absurdo que entraña, que hasta el más incrédulo de los corazones cede al dulce deseo de juntar las manos y rezar.

“Lo más probable es un segundo referéndum. Y que esta vez gane el remain”

“Lo más probable es un segundo referéndum. Y que esta vez gane el remain”

Tan denso en historia y en resonancias continentales, Horcher –con sus figuritas de Meissen y una carta inspirada en Mitteleuropa- parece hecho a propósito para reflexionar sobre los designios del proyecto europeo. En un momento en que, de la crisis del euro a las angustias del Brexit, la Unión parece zozobrar, The Objective ha querido reunir a dos personas de dos generaciones diferentes pero igualmente cualificadas a la hora de pensar Europa: Joaquín Almunia, economista y político de larga experiencia y vicepresidente de la Comisión entre 2010 y 2014, y el diplomático y ensayista Juan Claudio de Ramón. De Trump a Merkel, de las raíces de la crisis a las carencias y fortalezas de España y del secesionismo a la inmigración o los puntos de refuerzo del Mercado Común, esta larga conversación –más de dos horas- aquí editada toca los puntos más importantes de la Europa actual sin dejar de ofrecer un corolario de esperanza.

Berlín, hace cien años

Berlín, hace cien años

Las tres décadas que abarcan el nacimiento en 1889 en París de la Segunda Internacional y el fin de la Primera Guerra Mundial en 1918 han sido llamadas por un historiador como «el periodo apostólico de la historia del socialismo». De manera semejante a los cristianos primitivos, antes de que la suya fuera religión de Estado, también los militantes socialistas de entonces, desprovistos de toda culpa posterior, guiados por un idealismo incorrupto y con su crédito moral intacto, se dedicaron a promover y predicar el milenio socialista. En un mundo mucho más injusto que el nuestro, su fe era contagiosa. Su esperanza en el futuro, de una intensidad que resulta difícil imaginar. Tenían profeta, tenían doctrina (y no pocas discusiones teológicas), tenían comunidades de creyentes y corrientes heréticas, tenían apóstoles. Muchos de ellos estaban dispuestos a morir por sus ideas. Tuvieron, por lo mismo, mártires.

Publicidad
Publicidad
Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D