Cambios de titulares y libros de estilo

El veterano periodista Xavier Vidal-Folch ha tenido que rectificar una información en la que atribuía un entrecomillado a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, poniendo a caldo al presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo. En realidad Vidal-Folch no ha rectificado, más bien ‘le han rectificado’ desde la dirección de su periódico, dado que Pepa Bueno optó por retirar el entrecomillado en cuestión, cuando Vidal-Folch ratificaba que sus fuentes le confirmaban que él sí había dicho aquello.

En la última jornada era interesante leer y oír a veteranos periodistas de medios tan dispares como el director de OkDiario Eduardo Inda, o el director de THE OBJECTIVE Álvaro Nieto apuntar a la posibilidad de que, más que un error de Vidal-Folch, esto pudiera ser una rectificación de la propia Von der Leyen ante un posible triunfo electoral de Feijoo. Especialmente relevantes la visión del dire, que conoce bastante bien los resortes europeos por haber estado unos cuantos años moviéndose por esas latitudes.

Antecedentes

El 17 de abril de 2013, en plena crisis económica, la periodista de La Vanguardia Carmen del Riego, que en ese momento ejercía de presidenta de la Asociación de la Prensa de Madrid, publicó como titular unas supuestas declaraciones de María Dolores de Cospedal, a la sazón secretaria general del PP bastante impactante: «Nuestros votantes dejan de comer antes de no pagar las hipotecas». 

Aseguraban que Cospedal había dicho eso en una reunión a puerta cerrada ante parlamentarios del PP. En seguida las redes sociales pusieron a parirá la política, y saltó el hashtag #COSPEDALHIJADEPUTA. A las 11.39 de ese mismo día Dolores de Cospedal publicaba un desmentido. «Las afirmaciones que hoy se me atribuyen no son ciertas ni textuales, ni responden al espíritu de mi intervención de ayer», explicaba. 

Poco después de aquel desmentido La Vanguardia cambiaba el titular y donde ponía «Cospedal: ‘Nuestros votantes dejan de comer antes de no pagar hipotecas’» pasó a poner «Cospedal: ‘Los votantes del PP son los que pagan la hipoteca’». 

La propia Carmen del Riego aparecía ante las cámaras de La Sexta a las 12.30 de ese mismo 17 de abril para hacer una impactante rectificación según me dicen, textualmente no lo dijo así. Dijo «nuestros votantes pagan la hipoteca», dijo que «nuestros votantes lo pasan mal para llegar a fin de mes, pero pagan la hipoteca», dijo «nuestros votantes se aprietan el cinturón pero pagan la hipoteca». Ahora, me dicen que «dejar de comer nadie lo recuerda». El titular definitivo de la nota quedó en «La intervención de Cospedal».

Otro célebre caso también ocurrió en La Vanguardia en septiembre de 2015 cuando todo un veterano como Enric Juliana realizó una entrevista a Felipe González de la que dio el siguiente titular: «Felipe González: ‘Estoy a favor de una reforma que reconozca a Catalunya como nación’». Todo aquello causó una salida de críticas en tromba contra el expresidente por dar alas al ‘procés’, desde la oficina de Felipe González, Joaquín Tagar desmintió que en la entrevista el expresidente hubiera hecho tal afirmación. 

Enric Juliana se apresuró entonces a asegurar que antes de publicar la entrevista había remitido el texto a la oficina del expresidente y que se les había contestado «nada que objetar», pero Tagar replicaba diciendo que en el texto que a él se le había remitido entonces no figuraba tal titular. «El titular dice una cosa que nunca dijo Felipe González, el habló de identidad nacional, pero nunca de nación». 

El propio Felipe González tuvo que salir a la palestra: «Lamento decirles que esa frase no está en la entrevista, no la pronuncié y ni siquiera me hicieron esa pregunta. (…) Yo no puedo ratificar, ni rectificar lo que no he dicho en esa entrevista, eso es lo que hubiera dejado claro hoy, si me hubieran preguntado por eso, hubiera respondido, ni existió la pregunta, ni por tanto la respuesta que viene entrecomillada en mi boca, en esa entrevista eso no existió».

Peores consecuencias profesionales tuvo para Ramón de España publicar una polémica entrevista en El País a Juanjo Puigcorbé en diciembre de 2000 donde ponía una serie de entrecomillados (empezando por el titular ‘soy demasiado inteligente’) en el que el actor ponía a caer de un burro a media profesión del sector y que desató una de las mayores y más brutales cartas de rectificación a una entrevista publicadas hasta la fecha.

Al final es imposible saber al 100% lo que dijeron no dijeron Ursula von der Leyen, Dolores de Cospedal, Felipe González o el mismo Puigcorbé, si los cambios de titular se deben a errores profesionales del periodista o a jugarretas o tropezones del periodista. Pero todos tienen en común que no publicaban interpretaciones, sino entrecomillados. Y en el tema de los entrecomillados los periódicos, al menos El País, tienen libros de estilo muy claros: cualquier conflicto sobre la correcta transcripción se resolverá con la grabación y de no existir esta se concederá el beneficio de la duda a la persona a la que se atribuye el entrecomillado.

Cuando Europa Press atribuyó en 1993 unas palabras al hoy académico Juan Luis Cebrián que este negó haber dicho, su tocayo de apellido José Luis Cebrián pudo acreditar con una grabación que este había dicho lo que atribuían. Si ni Carmen del Riego, ni Enric Juliana, ni Ramón de España, ni hoy Vidal-Folch, disponen de audio, el entrecomillado se convierte en un boomerang para ello.