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Sesenta eurodiputados llaman a un boicot diplomático del Mundial de Fútbol de Rusia 2018

Sesenta eurodiputados de 16 países, principalmente polacos, han instado a los gobiernos de los países de la Unión Europea a seguir los pasos de Islandia y Reino Unido, que anunciaron el 26 de marzo que no enviarán ningún representante oficial a Rusia con motivo de la celebración del próximo Mundial de Fútbol.

Sesenta eurodiputados llaman a un boicot diplomático del Mundial de Fútbol de Rusia 2018

Sesenta eurodiputados de 16 países, principalmente polacos, han instado a los gobiernos de los países de la Unión Europea a seguir los pasos de Islandia y Reino Unido, que anunciaron el 26 de marzo que no enviarán ningún representante oficial a Rusia con motivo de la celebración del próximo Mundial de Fútbol. «En estos tiempos difíciles, nuestros gobiernos no deberían reforzar el camino autoritario y antioccidental del presidente ruso», Vladimir Putin, sino proteger «los derechos humanos, los valores democráticos y la paz», han señalado los diputados europeos en una carta difundida por la parlamentaria ecologista Rebecca Harms, que ha sostenido en su cuenta de Twitter que la combinación de «paz, deportes y Putin» es imposible.

La decisión de Londres y Reikiavik de boicotear a Rusia durante el Mundial de Fútbol, que se celebrará entre el 14 de junio y el 15 de julio, se produjo tras el ataque contra el exespía ruso Serguéi Skripal con gas nervioso en Reino Unido. Una agresión que el Gobierno británico atribuye a Rusia. Este ha sido el «último capítulo de la burla de Vladimir Putin» a los «valores europeos», según los eurodiputados que han secundado el boicot, que sostienen que el presidente ruso actúa como aliado del régimen de Bashar al Assad y de los separatistas prorrusos en Ucrania.

«Mientras los disidentes políticos y la prensa libre estén en peligro constante en Rusia y fuera del país, no podemos darles la espalda y estrechar la mano de Putin en un estadio de fútbol», han afirmado en su carta los eurodiputados, entre los que no se encuentra ningún representante portugués, español, italiano ni griego. Los parlamentarios han reconocido que «el deporte puede ayudar a construir puentes metafóricos», si bien han descartado que esta cita deportiva sea un evento al uso, máxime cuando «Putin hace explotar puentes reales en Siria».

«Tres días después de los Juegos Olímpicos de 2014 en Sochi, Putin invadió Ucrania y el mundo lo vio con consternación», han añadido los eurodiputados, que consideran que en esta ocasión «se pueden hacer las cosas correctamente», informa Afp.

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