Probamos el OnePlus 10 Pro, la mayor ganga de este Black Friday

El OnePlus 10 Pro es uno de los mejores teléfonos Android de este año en términos de calidad-precio. Si bien ya lleva un tiempo entre nosotros, esta semana ha vuelto a saltar a la palestra por ser uno de las mejores terminales que pueden comprarse durante el Black Friday. Y es que tanto en la web de OnePlus como en Amazon se puede encontrar durante estos días por 200 euros menos de su precio habitual. 

Dado que es un teléfono muy recomendable para tener en cuenta si estás buscando renovar el tuyo, no está de más que te contemos cuáles son sus puntos fuertes y por supuesto, sus debilidades. 

Especificaciones y rendimiento

El OnePlus 10 Pro tiene un diseño peculiar, con un módulo de cámaras rodeado con cristal y de forma cuadrada y una trasera de vidrio mate. Este acabado es agradable al tacto, pero lo mejor es que no se araña nada. Eso sí, resbala mucho, por lo que mi consejo es que no lo lleves nunca sin funda.

Tiene una pantalla enorme (6,7 pulgadas). Esto es bueno y malo al mismo tiempo. Bueno porque para ver contenido las pantallas grandes son una maravilla, pero malo porque si eres de manos pequeñas te va a ser muy complicado manejar el teléfono con una sola mano. Lo bueno es que no pesa demasiado, se contiene en los 200 gramos.

En mi opinión, la pantalla es su punto fuerte. En términos técnicos, es una Fluid AMOLED QHD+ de 120 Hz con sistema de eficiencia energética. Este tipo de panel lo encontramos en teléfonos con un precio mucho más elevado que el del OnePlus 10 Pro.

En cuanto a la experiencia de uso, la pantalla tiene un nivel de brillo impecable, así como una reproducción del color y una calibración del resto de ajustes correcta.  En resumen, podrás ver igual de bien los contenidos tanto si estás en un espacio interior o en la calle, con la luz del sol dándote de forma directa.

Por lo que respecta al rendimiento, da igual si estás buscando un teléfono para un uso comedido o uno para jugar a juegos y exprimirlo al máximo, porque en ambos aspectos cumple. 

Desde que llevo probando este modelo, no me ha dado ni el más mínimo problema a la hora de usarlo en cualquier escenario, aunque eso sí, cuando lo usas durante mucho rato (sobre todo jugando) se calienta bastante, pero sin llegar a quemar.

El sistema operativo que llega con el teléfono es un poco diferente a lo que se suele ver en Android, pero cuando llevas poco con él te acabas acostumbrando. 

Personalmente, creo que ha sido una terrible decisión por parte del fabricante cambiar en este modelo la ubicación de Shelf de OnePlus. Se trata de un panel con información adicional (como contador de pasos o el tiempo). Históricamente, siempre estuvo al lado izquierdo del escritorio, pero ahora se activa deslizando la pantalla hacia abajo. ¿El resultado? Abrirlo por error muchas —muchísimas— más veces de las que me gustaría.

En cuanto a las cámaras del OnePlus 10 Pro, no son lo más impresionante del mercado, pero son más que suficientes para un usuario medio y si me apuras, algo exigente. Tiene una cámara de 48 megapíxeles acompañada de una ultra gran angular de 50 MP y un teleobjetivo de 8 MP para hacer zoom óptico. 

En general, el conjunto de cámaras da buenos resultados, aunque hay escenarios como la noche, los retratos o los interiores con luz artificial donde a este teléfono le cuesta dar la talla y ponerse a la altura de la competencia.

Su batería tampoco es algo que destacar, ni para bien, ni para mal; en la media de los teléfonos de hoy en día. Tiene 5.000 mAh y desde que lo pones en marcha con la carga al máximo aguanta encendido un día entero, pero no más. En general no esperes encontrarte con una batería que te dure dos días, es el precio que pagar por una pantalla con tanto brillo y alta tasa de refresco.

Eso sí, lo bueno es que no se tarda nada en cargar, pues soporta una velocidad de carga de 80W. Esto se traduce en una carga completa en apenas media hora. Además, tiene carga inalámbrica y carga inversa con la que puedes cargar pequeños dispositivos como auriculares.

¿Lo compro o no lo compro?

Tras hacer un repaso por las características del teléfono, vamos a lo importante: ¿merece la pena comprarlo y aprovechar que ahora está más barato que nunca? La respuesta es sí, en el caso de que quieras tener un móvil de gama alta con carga rápida, pero sin dejarte un dineral.

La respuesta es negativa en caso le des muchísima importancia a las cámaras (con enfoque profesional) o si tienes las manos pequeñas.