Los vasos de agua que debe tomar una persona con hipertensión

Las personas que sufren hipertensión tienen que seguir ciertos hábitos saludables, más aún que quienes no la padecen. Algunas de las cosas que pueden ayudar a reducir la presión arterial son los controles periódicos, una buena alimentación, hacer ejercicio y mantenerse hidratados. De esta forma también aumentará la posibilidad de evitar trastornos de salud, como enfermedades cardíacas y derrames cerebrales.

Tener en el cuerpo un nivel de líquido suficiente asegura que los sistemas y órganos puedan funcionar correctamente, además de ayudar en la purificación de toxinas y microorganismo patógenos. Otro beneficio del agua es que ayuda a que la sangre circule mejor por el cuerpo, transporte oxígeno y nutrientes y elimine las acumulaciones de sal.

El cuerpo pierde agua de forma diaria a través de la orina, heces, la respiración y transpiración; es por ello que hay que reponerla de forma constante. Y aunque el agua esté presente en otros líquidos como los zumos, el té, el café, la leche o las bebidas alcohólicas, es importante no remplazarla por estas sino tomarla directamente.

¿Cuánta agua es recomendable beber?

La licenciada y responsable de la Unidad de Factores de Riesgo de Paraguay, Catherine Turnes, explicó a Clarín Internacional que «lo recomendable es beber entre 2 y 2,5 litros de agua» al día. Esto «equivale a ocho vasos diarios aproximadamente». No obstante, la nutricionista aclaró que esta es la recomendación estándar.

Las necesidades de ingesta de agua pueden variar según la edad y el sexo de la persona, así como dependiendo del tipo de actividad que realice y las condiciones medioambientales en las que viva. Por ello, es necesario consultarlo con un profesional para tener más precisión.

«Para mantenerse hidratado no hay nada mejor que beber el agua natural. Este hábito debe efectuarse a lo largo del día, sin esperar a tener sed, puesto que esta condición aparece cuando el cuerpo se encuentra deshidratado», concluyó Turnes.

Estos son los valores normales de la presión

La presión arterial se representa con dos números: uno superior (presión arterial sistólica) y uno inferior (presión arterial diastólica). El primer valor hace referencia a la fuerza de la presión cuando el corazón impulsa la sangre hacia las arterias del resto del cuerpo. El segundo, a la presión en los vasos sanguíneos entre latidos, cuando el corazón se llena y se relaja.

Se mide en milímetros de mercurio, abreviado como mm Hg. La presión arterial normal es cuando los valores están por debajo de 120/80 mm Hg. La hipertensión o presión arterial alta es la que aparece cuando uno o ambos números de la presión arterial son mayores de 130/80 mm Hg de forma continuada.

También puede ocurrir que el número superior de la presión arterial esté entre 120 y 130 mm Hg y el valor inferior sea menor a 80 mm Hg; en este caso, la persona tiene una presión arterial elevada. Por último, cuando la presión arterial es menor de 90/60, la persona tiene una presión arterial baja o hipotensión.

Algunos hábitos diarios para controlar la presión arterial

Como se ha mencionado anteriormente, el estilo de vida influye en los valores de la presión arterial. Es cierto que hay algunos factores externos, como la edad, que pueden provocar que suba, pero también hay algunos hábitos del día a día que sirven para intentar mantenerla controlada:

• Tener un peso saludable.
• Reducir el consumo de sal.
• Hacer ejercicio moderado de forma regular. A excepción que el médico indique lo contrario, la media mínima son 30 minutos de caminata diarios.
• Seguir una dieta rica en frutas, verduras, granos integrales y productos lácteos bajos en grasa.
• Beber menos alcohol.
• Descansar adecuadamente.
• No fumar.