Esto es lo que sucede en tu cuerpo cuando comes frutos secos a diario, según la ciencia
Todos sabemos que los frutos secos son sanos, pero ¿qué pasa en nuestro cuerpo si los comemos a diario?
Un bol con frutos secos, repletos de grasas insaturadas | Freepik
A estas alturas ya todos sabemos que los frutos secos son sanos, ya que están cargados de vitaminas, nutrientes, grasas buenas y antioxidantes. Y aunque hay de muchos tipos (desde nueces hasta almendras, pasando por pistachos, anacardos y avellanas), los beneficios son comunes a todos.
En THE OBJECTIVE ya te hemos hablado en numerosas ocasiones sobre los frutos secos, en especial sobre cuáles son los mejores para adelgazar. Hoy nos vamos a centrar en qué sucede en tu cuerpo si ingieres este alimento todos los días, con moderación:
Los frutos secos pueden darte una dosis extra de antioxidantes
Cuando comes frutos secos, también le estás dando a tu cuerpo una dosis importante de antioxidantes, los cuales pueden ayudar a proteger las células sanas del daño de los radicales libres en el cuerpo.
Así, un estudio realizado por la Universidad de Cornell y publicado en la revista Nutrients descubrió que los pistachos, en concreto, tienen una alta capacidad antioxidante que rivaliza con alimentos populares como los arándanos, las granadas, las cerezas y el vino tinto.
Más nutrientes
Los frutos secos pueden ayudarte a obtener más nutrientes a lo largo del día. Una investigación publicada en Nutrients halló que la incorporación de estos alimentos a la dieta mejoraba el perfil nutricional general, incluido el aumento de la ingesta de ácidos grasos omega-3, fibra y varias vitaminas y minerales, con disminuciones significativas del colesterol y la vitamina B12. Y en particular, el estudio descubrió que reemplazar solo el 15% de la ingesta de carne con frutos secos era suficiente para lograr estos beneficios.
Puedes adelgazar
Aunque es cierto que los frutos secos son muy calóricos y grasos, la ciencia ha descubierto que no nos hacen engordar y, más al contrario, que nos ayudan a adelgazar. De hecho, una revisión científica de 36 estudios detalló que el consumo regular de estos alimentos no estaba relacionado con el aumento de peso ni con el incremento del Índice de Masa Corporal (IMC).
Otra investigación llegó a conclusiones similares; y esta otra aclaró que aquellos que ingieren dos o más porciones a la semana de frutos secos tienen un riesgo 31% menor de engordar en comparación con los que no los comen.
Ayudarán a regular tus niveles de azúcar en sangre
Relacionado con lo anterior, cabe destacar que los frutos secos ayudan a regular el azúcar en sangre, que está influenciada por la cantidad de proteínas, grasas, fibra y carbohidratos presentes en los alimentos. Si comemos solo una fruta, por ejemplo, lo más probable es que tengamos hambre en media hora. Pero si consumimos la misma fruta con un puñado de frutos secos, tendremos menos picos y caídas de azúcar en sangre, lo que hará que nuestra energía no decaiga y que no tengamos hambre en muchas horas.
Puedes mejorar la salud de tu cerebro, reduciendo el riesgo de deterioro cognitivo
Tal y como afirma la nutricionista Trista Best, comer frutos secos como parte habitual de la dieta puede contribuir a una mejor salud cerebral y a reducir el riesgo de deterioro cognitivo.
«Los frutos secos son beneficiosos para la salud del cerebro porque son ricos en nutrientes esenciales como ácidos grasos omega-3, antioxidantes y vitamina E, que pueden ayudar a proteger las células cerebrales del estrés oxidativo y la inflamación», asegura Best en Eatthis. «Los frutos secos son una fuente rica en minerales como el magnesio y el zinc , que desempeñan un papel en la función cognitiva y la memoria».
Puede mejorar tu estado de ánimo
En los últimos años, los investigadores han descubierto cómo influye la dieta en nuestro estado de ánimo, y en especial en la depresión. Al respecto, el ensayo SMILES pudo demostrar que seguir la dieta mediterránea puede mejorar los síntomas de la depresión, especialmente si se consume una porción de frutos secos al día.
Otro estudio analizó el papel de la dieta en la depresión entre adultos jóvenes. Para este estudio, se pidió a los participantes que consumieran de dos a tres cucharadas de frutos secos y semillas por día, junto con otras modificaciones dietéticas. Al igual que en el estudio anterior, este mostró una mejora en los síntomas y episodios de depresión.
¿Y por qué sucede esto? Los expertos consideran que es por los aminoácidos que contienen estos alimentos, que son beneficiosos para el cerebro, así como por sus ácidos grasos omega-3, que son neuroprotectores.
Mejor salud el corazón
Los frutos secos son ricos en grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, conocidas como ácidos grasos omega-3 . Y una forma de disminuir los niveles altos de triglicéridos, que son un factor de riesgo de problemas cardíacos, es aumentando las grasas omega-3 en la dieta. Asimismo, se ha relacionado el consumo de estos alimentos ricos en este tipo de grasas saludables con niveles más altos de colesterol HDL (‘bueno’) y niveles más bajos de colesterol LDL (‘malo’).
Las nueces se asocian con una disminución de la inflamación.
La investigación científica ha confirmado que la inflamación crónica es una causa silenciosa de enfermedades graves como problemas cardíacos, cáncer, diabetes tipo 2 y otras afecciones médicas. Y es preocupante que aproximadamente tres de cada cinco personas fallezcan en el mundo debido a enfermedades relacionadas con la inflamación. Sin embargo, afortunadamente existen diversas medidas que se pueden tomar para enfrentar este problema.
Y una de ellas pasa por llevar una dieta adecuada que incluya frutos secos y en especial almendras, ya que una ración aporta alrededor del 48% de la ingesta diaria recomendad de vitamina E, que funciona como antioxidantes protege a las células del estrés oxidativo, lo que, a su vez, ayuda a reducir la inflamación .
